Washington. Cinco ex dirigentes de la empresa de seguridad privada Blackwater –llamada Xe tras involucrarse en numerosos escándalos en Irak y Afganistán–, fueron acusados por un jurado federal de Estados Unidos de posesión ilegal de armas e intento de obstrucción de la justicia. Entre 2003 y 2009, los dirigentes desarrollaron estrategias para ganar ventaja sobre sus competidores en contratos de seguridad y beneficiarse de acuerdos con el gobierno estadunidense.