Economía
Ver día anteriorMartes 8 de septiembre de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El organismo se muestra poco optimista respecto a una pronta recuperación económica

Inevitable déficit fiscal en el país por dependencia del petroleo: UNCTAD

Caída del PIB, por declive en la demanda exterior de manufacturas y la reducción del turismo, dicen economistas de la ONU

No se ha iniciado una verdadera reforma hacendaria: director de Moody’s

 
Periódico La Jornada
Martes 8 de septiembre de 2009, p. 22

A diferencia de otras naciones donde se calcula que el producto interno bruto (PIB) caiga en alrededor de 2 por ciento, México se encuentra en una recesión profunda, afirmó la la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD). Alfredo Calcagno, economista experto del organismo, manifestó que no somos optimistas respecto a una pronta recuperación económica del país.

Calcagno, quien presentó en México el Informe sobre Comercio y Desarrollo 2009, declaró que los gobiernos no deben temer un aumento en el déficit público, siempre y cuando una mayor deuda pública se canalice adecuadamente hacia actividades de reconocido efecto multiplicador y un redireccionamiento de los subsidios y apoyos fiscales. En muchos países un mayor déficit fiscal es algo inevitable frente a la reducción de los ingresos, dijo.

Sin embargo, aclaró, el gobierno mexicano, como muchos otros, tiene la posibilidad de elegir qué tipo de déficit fiscal es el que quiere: el país se va a ver más afectado que otros por su dependencia de los ingresos procedentes de materias primas, en este caso el petróleo, y entonces el déficit fiscal es inevitable.

Reducir el gasto público implica a su vez menores ingresos fiscales y si, por el contrario, el gasto público se mantiene o aumenta, así sea sobre la base del endeudamiento, es posible que también haya déficit, pero un déficit distinto porque ha habido mayor gasto público para sostener el nivel de actividad o por lo menos para que no caiga más, y de esa manera se salvan los ingresos fiscales, precisó el especialista.

Mientras tanto, un reporte de Reuters fechado en Ginebra, Suiza, donde se hizo la presentación oficial del informe sobre comercio y desarrollo, dice que economistas de Naciones Unidas pronosticaron que no habrá una pronta recuperación en la recesión global, y particularmente sobre México, se diagnostica que la caída del PIB se debió al declive de la demanda exterior de manufacturas y la reducción del turismo.

Ante esos problemas, apunta el informe, México ha sufri- do el impacto de la crisis más duramente, con una pérdida del PIB aproximada de 7 por ciento en 2009. Ese país, subrayó el reporte, se ha visto más afectado que otros debido al declive de la demanda exterior de manufacturas y a la reducción del turismo.

A unas horas de que el gobierno federal presente a la Cámara de Diputados su paquete de medidas fiscales para 2010, el director general de la consultora Moody’s México, Alberto Jones Tamayo, manifestó que el país requiere de cambios fiscales profundos que vayan más allá de los ajustes hechos hace dos años en la mal llamada reforma fiscal, para sustentar tasas de crecimiento superiores a los de la década pasada, y eso, manifestó, es la tarea que el país no ha comenzado.

Medida coyuntural para 2010

Según una entrevista con Notimex, Jones Tamayo calificó de coyuntural la mezcla de medidas que contendrá el paquete económico para el próximo año, el cual buscará aumentar los ingresos fiscales, reducir el gasto público y establecer un déficit temporal.

“Es una medida coyuntural y es, por cierto, apreciada y valorada por Moody’s como sintomática y confirmatoria del consenso que hay en México por parte del gobierno y el Congreso de tener una situación fiscal sana.”

El directivo apuntó que la mal llamada reforma fiscal de hace dos años realmente no lo fue. Se trató de cambios, ajustes, lo mismo que seguramente vendrá en el nuevo paquete. Sin embargo, no resuelve de manera fundamental la dependencia de los ingresos petroleros, revertir la crónica caída de la producción petrolera y tener mayores fuentes de ingresos fiscales que no provengan de los bolsillos de siempre.