Mundo
Ver día anteriorSábado 11 de marzo de 2023Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Cierra la segunda etapa de diálogo con los acuerdos de México

Avanza un pacto para el alto el fuego entre el ELN y Colombia

El canciller Marcelo Ebrard celebra el proceso de paz // La vicepresidenta del país sudamericano, Francia Márquez, saluda la tercera fase para abril en Cuba

Foto
▲ Desde la izquierda, los funcionarios de Colombia: el jefe negociador, José Otty Patiño, el canciller Álvaro Leyva; la vicepresidenta, Francia Márquez; los de México: el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, el subsecretario para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes, además del jefe de la delegación del ELN, Pablo Beltrán, en la firma de los acuerdos.Foto Afp
 
Periódico La Jornada
Sábado 11 de marzo de 2023, p. 23

La segunda etapa del diálogo entre el gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) concluyó ayer en México con la firma de una serie de acuerdos que serán la hoja de ruta para conseguir la paz en la nación sudamericana, anunciaron las autoridades de ese país y el grupo rebelde.

En una ceremonia realizada en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, ambas partes signaron los llamados Acuerdos de México, cuyos puntos principales serán avanzar en un alto el fuego bilateral, para aliviar las condiciones humanitarias de la población que se encuentra en la zona de conflicto, así como impulsar mayor participación de la ciudadanía de Colombia sobre el proceso de paz, en el que los puntos de vista tendrán un carácter vinculante.

De igual manera, se confirmó que la tercera fase de las negociaciones entre el ELN y el gobierno del presidente Gustavo Petro se realizarán en Cuba, probablemente a finales de abril.

Durante el acto protocolario, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, dio un muy breve mensaje en el que celebró la realización de este diálogo de esperanza y confianza en el futuro, además de destacar la importancia de alcanzar el fin de las hostilidades en Colombia, como parte de la consecución de la paz en la Patria Grande.

Por su parte, la vicepresidenta colombiana, Francia Márquez, agradeció al gobierno de México por ser sede de la segunda ronda de pláticas con el grupo guerrillero y destacó que el propósito de la actual administración de su país es cambiar el modelo económico y social que ha generado múltiples desigualdades e injusticias.

En ese tono, celebró que esta haya sido la primera vez que les puedo mirar a la cara al ELN sin miedo y enfatizó que la única vía en Colombia es alcanzar la paz, sacando las armas del camino, porque la guerra sólo ha dejado destrozos y una sociedad dolida y rota.

Márquez, primera afrodescendiente en la vicepresidencia colombiana, enfatizó: “pasar la página de la violencia, del dolor, del odio que se ha sembrado, de las ideologías que no nos han permitido avanzar, es el desafío que tenemos todos los colombianos. Como vicepresidenta, acompaño la decisión de avanzar en la paz total.

“‘Soy porque somos’ significa en la filosofía ubuntu que ‘yo soy si ustedes son’. Y desde ahí los invito a construir colectivamente esa nación en medio de nuestras diferencias y la diversidad”, recalcó.

En conferencia de prensa posterior al acto, la vicepresidenta saludó la importancia de las mujeres y los jóvenes en este proceso y rei-teró la importancia de tener una nueva agenda de diálogo y paz que busca avanzar en un acuerdo nacional y colocar el diálogo en la sociedad colombiana, y el cese de hostilidades, que es muy importante porque va a impactar de manera directa la vida de las personas que hoy están en medio del conflicto armado.

En la ceremonia también estuvo presente el canciller colombiano, Álvaro Leyva, y los delegados de los países que acompañan el proceso de diálogo, como Chile, Brasil, Venezuela, Cuba y Noruega, además de la representación de Naciones Unidas.

Los enviados del presidente Petro y del ELN, la última guerrilla reconocida del continente americano, mantenían diálogos en México desde el pasado 13 de febrero.

Dos semanas después, el gobierno colombiano reconoció al grupo como organización política armada rebelde, distanciándolo de otras bandas armadas, incluidas las de narcotraficantes, a las que Petro ofrece un proceso de sometimiento a la justicia a cambio de beneficios legales, estrategia bautizada como paz total, que busca poner fin a un conflicto armado de casi seis décadas que ha dejado 450 mil muertos. Los gobiernos de Venezuela y Brasil felicitaron por separado a ambas partes por los acuerdos alcanzados.

Con información de agencias