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Dona la familia Carrillo Gil al MACG el último cuadro que poseía de Orozco
 
Periódico La Jornada
Viernes 2 de septiembre de 2022, p. 6

En el 48 aniversario del Museo de Arte Carrillo Gil (MACG), celebrado el martes 30 de agosto, la familia del pediatra y coleccionista Alvar Carrillo Gil y su esposa, Carmen Tejeda, donó al recinto de San Ángel el último cuadro que resguardaba de José Clemente Orozco. El óleo Resurrección de Lázaro, pintado en 1942, se incorporó a la colección del recinto en memoria de su nieto Armando Sáenz Carrillo, fallecido el 17 de enero de 2018 a los 62 años, quien siempre estuvo pendiente del cuidado del acervo.

En 1972, el matrimonio Carrillo Gil donó al pueblo de México su colección de arte para su resguardo, con la que dos años después se inauguró el MACG. Con el arribo de Resurrección de Lázaro, la colección del museo asciende a mil 419 piezas. En 2014, a propósito de los 40 años del espacio, la familia aportó el óleo Retrato de Carmen Tejeda (1944), también del muralista jalisciense.

Con el fin de cuidar el acervo del MACG, Sáenz Carrillo estudió museografía y trabajó en el recinto de 1986 al 1991. Después colaboró en proyectos curatoriales y museográficos, expresó su hermana Gabriela Sáenz Carrillo en la ceremonia encabezada por Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal. En la familia crecimos con amor al arte por encima de lo que fuera, y con amor al pueblo de México, porque sabíamos que mi abuelo trabajó toda su vida para formar una colección de arte, señaló la donante.

Carrillo Gil regaló Resurrección de Lázaro a su hija Gabriela; en el reverso del cuadro escribió: Para mi hija Gaby con el amor de padre que le tengo. Se trata de un cuadro fuerte y doloroso, con gran carga emocional para la familia, por la dedicatoria y porque siempre estuvo en la sala de su casa. En 2016 falleció doña Gaby; entonces, su hija conservó la pintura. Ya enfermo, Sáenz Carrillo dijo a su hermana que la vocación del cuadro era volver al museo; Gabriela estuvo de acuerdo.

A lo largo de los años, la lucha siempre fue el cumplimento de lo establecido en el acuerdo de donación respecto de la exhibición de la colección en el museo. En vísperas del medio siglo del MACG, Sáenz Carrillo se puso a pensar lo que diría su hermano: “Va siendo hora de que la colección fundacional del museo quede expuesta de manera permanente en el primer piso. Así cumpliría ese sueño de un doctor nacido en un pueblo perdido de Yucatán, quien hizo dinero para comprar ‘cuadritos’”.

Frausto refrendó la petición de Sáenz Carrillo: En este primer piso debe cumplirse la voluntad de la palabra de Armando y ser el lugar para la colección permanente. Carrillo Gil no sólo coleccionó cuadritos, sino también reunió arte maya. La secretaria de Cultura recordó que hace unas semanas el Palacio Cantón, en Mérida, que alberga al Museo Regional de Antropología, recibió la colección Alvar y Carmen Tejero de Carrillo Gil, integrada por 321 piezas prehispánicas y artesanales.

Lucina Jiménez, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, señaló que de su red de museos, el MACG es el que posee el mayor número de obras de Orozco. Con la presente donación, se cierra un ciclo de actos de espléndida generosidad de la familia Carrillo Gil, convencida del papel del arte para fomentar la apreciación estética y el pensamiento crítico en la sociedad.

En ese acto también estuvieron Tatiana Cuevas, directora del MACG; Liliana del Río, viuda de Armando Sáenz, y Diego Prieto, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia, entre otros.