Washington. La futbolista Megan Rapinoe y la gimnasta Simone Biles recibieron ayer la Medalla Presidencial de la Libertad, el mayor honor civil en Estados Unidos. Figuran entre los 17 honrados por el presidente Joe Biden por sus contribuciones a la prosperidad y los valores de su nación. Rapinoe, estrella de la selección, está muy comprometida con la igualdad salarial de género, la justicia racial y los derechos LGBT+. Tras el acto en la Casa Blanca, la delantera tendrá que reincorporarse con las barras y las estrellas para el Premundial que se disputa en Monterrey. Biles, por su parte, es la gimnasta más condecorada de la historia y es una gran defensora de la salud mental de los atletas y víctimas de agresiones sexuales.