Madrid. Barcelona empieza a parecer lo que acostumbra, un equipo de cuidado y con toque fino y peligroso. Ayer, el blaugrana goleó 4-2 al Atlético de Madrid –donde el mexicano Héctor Herrera entró al 75– y avanza al cuarto puesto de la tabla que le permite estar en posición de Liga de Campeones.

Este Barça llevaba ya tres goles desde la primera mitad. Yannick Carrasco abrió el marcador por los colchoneros en una acción en la que recibió un pase filtrado de Luis Suárez antes de rematar cruzado y poner en movimiento el tanteador a los ocho minutos.

Pero la respuesta azulgrana fue inmediata y con un desplante de autoridad que hacía tanto no mostraba el club catalán, tan minimizado y en apuros en el pasado.

Jordi Alba surgió con la prestancia de un emperador y con una soberbia volea de zurda mandó a las redes su tiro dos minutos después del gol colchonero.

Pablo Martín Paez Gavi logró la remontada del cuadro catalán con un cabezazo tras un servicio del nuevo refuerzo Adama Traoré a los 21.

Poco antes del descanso Ro-nald Araujo selló un primer tiem-po de ensueño del Barça al aprovechar un contrarremate tras el rebote de la pelota por un tiro de Gerard Piqué que dio en el travesaño.

El veterano Dani Alves –quien regresó al Barcelona como refuerzo en el periodo invernal– hizo más escandaloso el marcador a los 49, al estrenarse como goleador con un disparo raso en el área tras recibir una diagonal retrasada de Gavi.

El uruguayo Luis Suárez puso fin a una racha de ocho jornadas sin marcar, al anotar con testarazo en el área chica a los 58. El atacante charrúa se guardó el festejo por respeto a su pasado culé.

Alves, expulsado

Los azulgranas afrontaron los últimos 20 minutos con 10 elementos después de que el árbitro, Jesús Gil Manzano, recurrió al VAR para sancionar con una tarjeta roja un pisotón de Alves so-bre Carrasco.

El Barcelona llegó a 38 puntos para desplazar a los colchoneros de la cuarta posición, última que da pase a la próxima Liga de Campeones.

En tanto, el Real Madrid tuvo un partido difícil para vencer apenas por 1-0 al aguerrido Granada, para consolidarse en el liderato de La Liga. Asensio recibió el esférico tras una recuperación del balón de Eder Militao y no lo pensó para soltar un zapatazo que estremeció las redes a los 74 minutos.

Los merengues presentaron un cuadro diferente a lo usual debido a las ausencias de sus mejores atacantes, Karim Benzema y Vinícius Júnior, así como las de Ferland Mendy, Casemiro y Lucas Vázquez en la parte baja.

En otro choque, el Betis perdió en su visita al Villarreal por 2-0. El cuadro andaluz tuvo a Andrés Guardado de titular, pero salió de cambio, y Diego Lainez observó el duelo desde la banca.

Finalmente, Valencia igualó sin goles con la Real Sociedad.