La Fiscalía General de la República entregó al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep) un cheque por 2 mil millones de pesos, correspondientes a recursos recuperados tras la comisión de delitos graves.

El hecho fue situado por el presidente Andrés Manuel López Obrador en el terreno de lo inédito: nunca se había recuperado dinero de indagatorias judiciales.

El fiscal general, Alejandro Gertz Manero, no identificó a qué casos corresponde lo decomisado, porque las investigaciones continúan, pero detalló que se logró gracias a una denuncia que inició la Consejería Jurídica del gobierno federal.

Los fondos provienen del combate no sólo a la delincuencia común, sino también a la de cuello blanco, agregó López Obrador.

“Si son 2 mil millones, esto nos sirve para pagar los premios de la ‘rifa’ del avión presidencial, y lo que obtengamos de la venta de los cachitos de lotería nos va a alcanzar sin ningún problema para destinar 2 mil 500 millones a la compra de equipos médicos. Esto es justicia”, agregó.

Además, el Indep informó que existen 2 mil 10 millones disponibles por bienes a los que se aplicó la extinción de dominio y posteriormente se vendieron. Otros mil millones forman parte del fondo de reserva y gastos.

Al mostrar el cheque, López Obrador expresó a quienes se creían dueños de México: esto es para que les produzca, respetuosamente, un poquito de comezón.