La medalla olímpica de Paola Espinosa la queremos todos, di-jo el entrenador Iván Bautista ante el compromiso que hay en Tokio 2020, en lo individual, y también en sincronizados tres metros con Melany Hernández.

Sabemos de la calidad que tiene y tanto ella como todo el equipo multidisciplinario queremos levantar la mano para buscar esa presea, asevera uno de los técnicos más reconocidos del mundo que apuesta por la sudbajacaliforniana en una prueba que le está costando trabajo no por la técnica, sino por el aumento de peso y más fuerza en las piernas.

Estamos hablando de una campeona y hay que arriesgarnos, asegura con firmeza Bautista, quien reconoce el ímpetu, el coraje y la mentalidad fuerte que tiene la doble medallista olímpica, logros que tuvo en la plataforma de 10 metros sincronizados en Pekín 2008 con Tatiana Ortiz al ganar el bronce, y Londres 2012 al lado de Alejandra Orozco, plata.

Después de que Paola tomó la decisión de cambiarse al trampolín tras su última participación en los 10 metros en la justa olímpica de Río de Janeiro 2016, donde finalizó en cuarto lugar, y dejar a la entrenadora china Ma Jin, para irse a Guadalajara a trabajar con el equipo de Bautista, la transición ha ido en ascenso luego de su maternidad que la mantuvo alejada de las competencias durante más de un año.

“El trampolín es una prueba complicada y estamos conscientes del nivel que hay en el mundo, porque todas realizan los mismos clavados, salvo una australiana que se ha separado de las demás.

“La trayectoria (de Paola) ayuda un poco. Su estado de ánimo influye mucho y estamos trabajando todos para que sienta el apoyo. Las finalistas olímpicas, la mayoría, tienen un somatotipo para esta prueba, el cuerpo tiene que ir adaptándose, longar y doblar más en el trampolín para que sea flexible y es lo que estamos haciendo.

Trabajar más en lo físico porque es determinante. En su lista de clavados no hay cambios; ella ha sido muy valiente en su preparación y quiere dominar bien el tres y media vueltas al frente en posición B (escuadra con piernas extendidas) que falló (en los Juegos Panamericanos de Lima) y no cualquiera lo hace, explica Bautista.

Ayer, Paola continuó sus entrenamientos en la alberca del Code Jalisco, tras recibir el Premio Nacional al Mérito Deportivo 2019 en un viaje relámpago a la Ciudad de México.

Está muy motivada y nosotros estamos deseando eso, trabajar bien fuerte para representar a México; claro, nos gustaría que la Federación Mexicana de Natación decidiera si la plaza olímpica ganada por Paola y Melany con el bronce en el Campeonato Mundial de Gwangju de este año, sea para ellas porque es un parámetro de mucho fundamento, pero tenemos que esperar, añade el hidalguense nominado como mejor entrenador en los premios PanamSport 2019.