Economía
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Ex director de la ONUDI

Urge aclarar la fuente de los recursos para las grandes obras del sexenio
 
Periódico La Jornada
Domingo 5 de mayo de 2019, p. 15

Los grandes proyectos de infraestructura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador corren el riesgo de convertirse en oportunidades perdidas de detonación de inversiones y desarrollo económico del país, ya que hasta el momento no se ha puesto en claro de dónde van a salir los recursos, si serán fiscales o provendrán del financiamiento público o privado, manifestó Mauricio de María y Campos, quien fue director de la Organización de Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi) y subsecretario de Fomento Industrial en el sexenio de Miguel de la Madrid.

Además, aseguró, el sector privado está en espera de que se desate el gasto público, dada la incertidumbre que prevalece por el cambio de administración, por lo cual resulta fundamental el diálogo y la articulación entre autoridades y empresarios.

Sostuvo que no basta con lanzar licitaciones y realizar concursos, sino que debe ponerse énfasis en la creación de mecanismos que permitan la existencia de una participación efectiva de las empresas, sobre todo de las nacionales, para que se generen empleos.

En proyectos de infraestructura anunciados por el Presidente, como el Tren Maya, el Corredor Transístmico y la refinería de Dos Bocas, no vemos un plan congruente, con objetivos de política claros. ¿De dónde van a salir los recursos financieros?, cuestiona De María y Campos, actualmente investigador asociado de El Colegio de México, entrevistado durante la conmemoración del 100 aniversario de Víctor Urquidi, quien fue director de dicha institución, funcionario del Banco de México y de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.

Puntualizó que para poder crecer se requiere aumentar la inversión pública, para que llegue a 5 por ciento del producto interno bruto (PIB), ya que en el gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto fue de sólo 2.5 por ciento y no solamente fue mediocre, sino una de las más bajas desde 1946.

Es la inversión pública la que promueve la inversión privada, dijo. Subrayó que todavía están vigentes las enseñanzas del economista Víctor Urquidi, de que los recursos para los proyectos de infraestructura solamente pueden provenir del ámbito fiscal o financiero.

Estamos a la expectativa de cuál utilizarán, porque no hay más que esos dos caminos. Se necesitan recursos fiscales o financiamiento de la banca de desarrollo y privada. También se requiere identificar y echar a andar proyectos que necesitan un horizonte de confianza, pero es lo que no acabamos de ver, puntualizó De María, quien también forma parte del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico.