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La política de brazos abiertos ya comenzó a generar sobrecupo: CNDH
 
Periódico La Jornada
Miércoles 1º de mayo de 2019, p. 17

El gobierno federal no reprimirá a los migrantes ni cerrará las puertas, aseguró el subsecretario de derechos humanos, población y migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, al tiempo de advertir un mayor flujo de venezolanos, derivado de los conflictos en aquella nación.

Ya hay una afluencia muy importante de migración venezolana en México; es la segunda nacionalidad en materia de solicitud de refugio. Se prevé sin lugar a dudas que se va a incrementar; claro, no en la magnitud de Colombia a donde emigraron más de un millón de personas, dijo.

–¿La situación con los migrantes ya se salió de control?

–No. Aquí hay que tener clara una cosa: la migración es un fenómeno internacional que hoy se ha establecido en México y llegó para quedarse; el problema de la movilidad internacional es la migración intercontinental (que busca ir a Estados Unidos) y las redes de tráfico, que buscan al país como punto de ingre-so al continente.

Por su lado, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, advirtió que la política migratoria de brazos abiertos implementada por el actual gobierno ha comenzado a generar problemas de sobrecupo en estaciones de ayuda a trabajadores internacionales sin documentos, además de otros posibles abusos a las garantías de dicha población, lo cual deja ver que en México no existen condiciones para recibir una cantidad tan grande de migrantes.

Urge que los tres poderes se unan y preparen

Al término de un acto con motivo del Día del Niño, resaltó que el país no había vivido un fenómeno de migración masiva como el que está experimentado hoy, por lo cual es urgente que los tres niveles de gobierno se articulen para hacer frente a este escenario, con respeto a las garantías de los trabajadores indocumentados, pero también haciendo respetar las leyes del país.

Quien ingrese al país, en legítima solicitud de acceder a los estándares de protección de la migración, también debe tener un comportamiento de orden. No con violencia se puede exigir un derecho, apuntó.