Sábado 27 de abril de 2019, p. 10
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que nuestro país continuará protegiendo a migrantes, al tiempo de procurar una buena relación, sin confrontación, con las naciones de origen y destino de las personas en tránsito, en particular con Estados Unidos, que vive ahora –indicó– una etapa de confrontación político electoral.
“Por responsabilidad, por solidaridad, por respeto a otras naciones, estamos ayudando, colaborando, y lo vamos a seguir haciendo”, señaló en conferencia de prensa.
Precisó que la ola que busca llegar a Estados Unidos es de la región centroamericana, principalmente, y no de mexicanos quienes sólo representan 16 por ciento.
En cuanto al vecino país dijo que “lo cortés no quita lo valiente” y serán respetuosos debido a la proximidad de sus elecciones, pues ello explica que los partidos pongan en la agenda los temas de migración y de México. Ello significa –comentó– propaganda, confrontación política y electoral, a veces exagerada.
“Política es tiempo. Hay que entender los tiempos que estamos viviendo y por eso lo mejor es la prudencia y actuar de manera responsable”. Reiteró que con la nación del norte y con los demás aplica “la frase histórica, rectora y ejemplar de ‘el respeto al derecho ajeno es la paz’. Entonces, es lo que estamos haciendo”.
Admitió que la situación en México es compleja por esta circunstancia y se deriva de la crisis económica y de violencia en Centroamérica.
Reiteró la oferta de dar “visas de trabajo” a quienes busquen una oportunidad aquí, pero sobre todo protección, para que no sean víctimas de abusos, agredidos por bandas o por traficantes de personas que los “sonsacan” para que vayan a Estados Unidos.
“Nos preocupa mucho la seguridad. No queremos que se repitan escenas de horror como la desaparición de migrantes en Tamaulipas; todo este tipo de acciones injustas e inhumanas. Estamos al tanto y protegiendo”, indicó.
En la conferencia, a la que asistieron los secretarios de la Defensa Nacional y el de Comunicaciones, se le preguntó al Presidente acerca del episodio del jueves en la estación migratoria ubicada en Tapachula, Chiapas, donde se registró una salida masiva de extranjeros y delegó a Gobernación dar la respuesta.