Una de las reformas constitucionales que se discutirán la próxima semana en el Senado tiene el propósito de establecer que las pensiones y en general las prestaciones para jubilados y pensionados se determinen con base en el salario mínimo y no en la unidad de medida y actualización (UMA), ya que de lo contrario el ingreso de los trabajadores en retiro se irá deteriorando.

En el dictamen, que ya circuló la Comisión de Puntos Constitucionales, se advierte que la reforma constitucional de 2016, por la que se desindexó el salario mínimo a fin de que dejara de ser referente para el pago de multas y otras obligaciones derivadas de leyes federales, dio paso a la creación de la UMA.

Sin embargo, se aplicó también como referente para el pago de prestaciones de seguridad social y pensiones, y la intención de la reforma es que ello se modifique en la Constitución, ya que ha propiciado la disminución del ingreso de jubilados y pensionados.

En la exposición de motivos se precisa que, de acuerdo con el Inegi, el valor de la UMA se elevó de 80.60 pesos diarios en 2018 a 84.94 pesos diarios para 2019, es decir, un aumento de 3.89 pesos, mientras el salario mínimo ha tenido un alza significativa a partir de enero de este año.

La reforma a la fracción 6 del artículo 123 constitucional dice que será el salario mínimo el que se utilice como índice, unidad, base, medida o referencia para los derechos y prestaciones de la seguridad social.

Esa modificación permitirá que las pensiones sean beneficiadas en total plenitud y con ello los trabajadores en retiro tendrían mejores condiciones de vida en su vejez. No debe olvidarse que así como el salario es considerado un derecho de los trabajadores, la pensión y la seguridad social también lo son”.

Se destaca que, de acuerdo con el Índice Mundial de Pensiones Mercer, Melbourne, con el que se mide la sostenibilidad de los sistemas pensionarios, México mantiene uno de los niveles más bajos. “Nuestro país obtuvo 45.3 puntos de un total de 1000, lo que colocó al país en la posición 25 de entre 27 naciones.

Ello significa que el sistema pensionario mexicano tiene debilidades y omisiones que deben ser resueltas.

En ese contexto, la reforma es importante, a fin de beneficiar a jubilados y pensionados que se encuentran en situación desfavorable, ya que por su edad presentan mayores gastos en salud y su situación sería peor con una baja de sus ingresos por el uso del UMA.