A pesar de las condiciones de precariedad en las que laboran decenas de miles de maestros de primaria y secundaria en México, con carencias de infraestructura y sin equipamiento, aulas de cómputo que no funcionan, sin biblioteca o con un acervo muy pobre, plantillas docentes incompletas y frecuentes cambios de directores, logran crear una atmósfera de trabajo agradable donde hay avances en algunas prácticas de enseñanza, indicó el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

Sin embargo, también reconoce que no todos los maestros que alcanzaron la categoría de idóneo o destacado en su evaluación de desempeño, lograron en la práctica en el aula realizar una buena labor, y señaló el caso de una maestra que fue evaluada como destacada, pero maltrataba a sus alumnos, tenía con ellos un trato difícil.

Al dar a conocer, en un foro virtual, los principales hallazgos de una investigación sobre la práctica docente en educación básica, elaborada por especialistas del Departamento de Investigaciones Educativas (DIE) del Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, destacaron que hay avances en la didáctica de la enseñanza de las matemáticas, principalmente en primaria.

Se detectó que hay pocas oportunidad para una colaboración entre pares, es decir, que los mismos profesores se apoyen en materia pedagógica, porque son excelentes en unas materias y en otras no.

Los investigadores del DIE, David Block Sevilla, especialista en didáctica de las matemáticas, y Alicia Civera Cerecedo, experta en formación docente y culturas magisteriales, señalaron que se observó en primarias que los maestros siguen de forma puntual el calendario escolar y los contenidos que se aplican en cada periodo del año lectivo.

No obstante, consideraron que quita la posibilidad de que los educadores trabajen de acuerdo con las necesidades de aprendizaje de los estudiantes, pues enfrentan múltiples desafíos, como atender a alumnos con rezago educativo, ausentismo, migrantes, con problemas de salud, discapacidad, mala conducta y mucha violencia social e intrafamiliar.

Explicaron que los profesores deben hacer una enorme cantidad de trabajo administrativo y cumplir con las expectativas de los padres sobre lo que debe ser el aprendizaje de sus hijos.

A pesar que el estudio sólo se aplicó en 25 escuelas –15 primarias y 10 secundarias– indicaron que los maestros deben aprender a trabajar en estas condiciones donde muchas veces no ayuda que los profesores pidan apoyo económico a los padres de familia para las escuelas, pues afecta sus relación con ellos.

En secundaria, reconocieron que el escenario se complica debido a que los docentes enfrentan muchos problemas de disciplina, una enorme carga laboral y cuentan con poco tiempo para realizar toda su planeación.