Espectáculos
Ver día anteriorDomingo 24 de febrero de 2019Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Con insectos, El canto de la rebelión aborda temas sociopolíticos para el público infantil
Foto
▲ Ocho actores, dos músicos, títeres de diferentes tamaños, botargas y máscaras dan vida a los personajes en el Centro Cultural Helénico.Foto cortesía de la producción
 
Periódico La Jornada
Domingo 24 de febrero de 2019, p. 7

Un canto de libertad, interpretado con títeres, reggae, son jarocho, tango, surf o guajira enmarca la historia de una comunidad donde sus habitantes, los insectos, descubren el poder transformador de la unión tras levantar sus antenas.

El canto de la rebelión es un musical que devela al público infantil temas políticos y sociales, aunque inmersos en rítmicos sonidos de Latinoamérica, con personajes alucinantes que llevan a un viaje por mundos extraños y coloridos.

En la trama aparecen la cigarra, el escarabajo, la mosca, el grillo, la libélula y la hormiga, entre otros personajes que forman parte de El Podrido, un diminuto pueblo que se encuentra en el paso de las vacas, un lugar donde tiembla con frecuencia. El Gobernador es un escarabajo estercolero que no quiere mudarse, ya que mientras más desechos fecales tenga, mayor será su poder.

Entonces, La Cigarra, con su música, despierta el deseo de los habitantes del pueblo de buscar un lugar mejor donde vivir. Preocupado y molesto, El Escarabajo pierde la calma y prohíbe la música, de modo que la primera decide partir, seguida por La Luciérnaga y La Hormiga.

A partir de ese momento, las tres amigas descubrirán la importancia de la unión para salvar al pueblo del peligro que se avecina, explicó Adrián Ladrón dramaturgo y director del montaje.

La Cigarra es el personaje más singular, pues es una cantante que con su música fomenta entre los demás una esperanza para encontrar un mejor lugar para vivir.

Temas pertinentes

En escena aparecen ocho actores y dos músicos, quienes dan vida a gran número de personajes. También se emplean títeres de distintos tamaños, además se usan botargas y máscaras, de tal manera que parezca que los insectos están creciendo de tamaño, en un juego de proporciones. Aunque en la trama se abordan temas sociales y políticos ha resultado interesante observar la pertinencia de hablarles de ellos a los niños.

Nos parece que lo mejor es no subestimar a los pequeños; más bien, el reto es para los artistas, para saber cómo cuentan la historia, puedan seguirla, parezca entretenida e invite a tomar una postura acerca de acontecimientos sociales, como la injusticia, el abuso de poder o la represión a la libertad de expresión.

El canto de la rebelión también tiene un disco con música de la obra, la cual se presenta en el Centro Cultural Helénico, ubicado en avenida Revolución 500, colonia Guadalupe Inn, con funciones sábados y domingos a las 13 horas, hasta el 21 de abril.