Cultura
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Una buena sección de cultura es el rincón sagrado de cualquier periódico
 
Periódico La Jornada
Domingo 24 de febrero de 2019, p. 5

Una buena sección de cultura en los medios no es un lujo, sobre todo en impresos; es el rincón sagrado de los periódicos, porque ahí es donde los lectores ven otras cosas, afirma el periodista Adrián Figueroa, autor del libro Tiempo de encuentro, en el que reúne 17 entrevistas con personajes de la vida cultural y científica.

Juan Villoro, Gilles Lipovetsky, Ramón Vargas, Carlos Prieto, José Sarukhán, Pablo Rudomín, Eusebio Juaristi, Linda Manzanilla y Eduardo Matos Moctezuma son algunos de los que dan vida a los textos del libro, publicado en la colección Periodismo Cultural de la Dirección General de Publicaciones de la Secretaría de Cultura, y que incluye un reportaje acerca del blues.

El desafío para el periodismo cultural es el de siempre, añade Figueroa Nolasco, quien ha trabajado en distintos sectores de la profesión: desde la sección de internacionales a la de ciencia y salud, pasando por información general, comunicación social y, por supuesto, cultura, sección a la que llama el rincón sagrado de los periódicos, porque es donde los lectores se enteran de cosas que realmente les llenan de gusto o les dan vías para comprar un libro, ver un concierto o una exposición. Es este rincón sagrado donde el periodismo realmente tiene su razón de ser, que no es educar, pero sí dar líneas y ofrecer conocimientos, que es lo que hacen las secciones de ciencia, dos secciones que además son mundos fabulosos.

Figueroa, periodista desde 1988, afirma que el reto de las secciones de cultura es mantener la calidad, mientras el periodista cultural es uno de los trabajos más completos que existen dentro del periodismo, no sólo por la necesidad que tienen los reporteros de este rubro en mantenerse informados de todo lo que ocurre tanto en la cultura y la ciencia como en las notas políticas, económicas y sociales dentro y fuera del país.

A final de cuentas todo lo que vivimos es producto del desarrollo cultural y científico. Ser periodista cultural demanda mayor estudio todos los días: leyendo libros, artículos, viendo televisión, revistas, saber de todo. Tiempo de encuentro es un homenaje no sólo a los entrevistados sino a la labor del reportero.

Las entrevistas que conforman el libro entran en el género de semblanza. “Este libro nace por una entrevista que hice al ministro José Ramón Cossío; al terminar la plática le pregunté por un balón de basquetbol y me dijo que él no jugaba, que se lo había regalado un amigo, y me contó qué era lo que le gustaba. Al redactar la entrevista dije: ‘por qué no hacemos entrevista de semblanza. De repente te encuentras con cosas realmente impresionantes: como la de Juan Villoro, quien cuenta cosas como que no leía de chico y que hacía un periódico de chismes”.

Hoy, el periodismo cultural “tiene la gran oportunidad de ser la bandera de otra etapa del periodismo. Este género con todas sus herramientas y profesionalismo va a marcar la ruta para que también se haga buen periodismo en redes sociales, donde hoy tenemos cosas explosivas.

“Toda esa herramienta del periodismo cultural abrirá caminos para que se inserte en las redes sociales la gente que viene, que aprenda el oficio y lo desarrolle en Facebook o Twitter, para que se hagan más profesionales, alejados de las fake news; que su labor sea de impacto, con argumentos, no escandalosa.”

De ahí que los periodistas que ya vamos de salida tengamos la encomienda de formar la escuela que nos hizo a nosotros; que las nuevas generaciones aprendan a ir a investigar, de que si vas a entrevistar a alguien saber si tiene título de doctor o licenciado y qué ha hecho, enseñarles el sistema de trabajo a la vieja usanza para que hagan buenos textos periodísticos. Esa es otra misión y reto del periodismo cultural: dar consejos, enseñar.

El problema es que ahora se confunde periodismo con redes sociales. La de periodista es la profesión más cercana al hombre común; nosotros no somos noticia, simplemente somos un catalizador de lo que está en el entorno para mostrarlo.