Sociedad y Justicia
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Estudiante de ingeniería cuenta lo difícil que es abrirse camino

En EU hay que trabajar todo el día para sobrevivir: dreamer
 
Periódico La Jornada
Domingo 10 de julio de 2016, p. 30

Giovanni Rosas Escobedo, originario de San Luis Potosí, llegó a Dallas, Texas, cuando apenas tenía 15 años. Iba con la ilusión de alcanzar el sueño americano. Tras 12 años de haber entrado indocumentada a Estados Unidos, afirma que ha tenido que luchar muy duro para salir adelante.

Llegue con la visión que cuentan los migrantes; esas historias bonitas de que sí se puede, pero realmente es diferente. Hay que trabajar todo el día para sobrevivir, afirma.

Rosas Escobedo es parte de un grupo de dreamers (indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo niños y han crecido en esa nación) que estuvieron en México por casi un mes como parte de un programa de intercambio cultural, que busca que estos jóvenes conozcan sus raíces y puedan difundir lo que realmente es el país.

Entre las organizaciones promotoras del proyecto se encuentran el Centro Latino para el Desarrollo de Liderazgo, El Colegio de México (Colmex), el Instituto Matías Romero y el Instituto de los Mexicanos en el Exterior de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Durante su estancia, los integrantes del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (Daca, por sus siglas en inglés), visitaron la capital mexicana y Puebla. Tomaron clases de historia, antropología y sociología en el Colmex y recorrieron sitios históricos y emblemáticos. También se adentraron en zonas poco concurridas por turistas, como el barrio bravo de Tepito.

Giovanni, quien actualmente estudia ingeniería biomédica en la Universidad de Texas, Río Grande Valley, y al mismo tiempo trabaja con un diputado, luego de haber laborado como recolector de basura y lavatrastes y de realizar grandes sacrificios para superarse, confiesa que llegó a México con miedo a la inseguridad, porque sólo se enfatiza el México malo, pero descubrí que no es así, que hay de todo, como en cualquier otra nación.

A menos de 24 horas de regresar a Dallas, dijo en entrevista que se va con la idea de que el país tiene mucho potencial.

El migrante afirma que ha sufrido demasiado y no quisiera que otras personas pasaran por lo mismo, pero para ello es necesario promover el desarrollo nacional, para que no tengan que abandonar sus lugares de origen. Esto se puede hacer desde la Estados Unidos, motivando a la gente a votar, impulsando inversiones o promoviendo cooperativas, dijo.