Oaxaca, Oax.

Recorrer los pueblos y comunidades de su estado en dos meses de campaña conducen a Alejandro Murat a emitir un diagnóstico difícil de los padecimientos de la entidad: ‘‘Oaxaca está enfermo, abandonado, padece hartazgo de mentiras, de simulación, de demagogia, de miseria, de pobreza, de corrupción e impunidad. En pocas palabras, debe dejar de ser el estado de las promesas y empezar a ser el estado de hechos y realidades que se conviertan en riqueza social’’.

El ex diputado federal, funcionario federal que administró 990 mil millones de pesos al frente del Infonavit, hoy se perfila a la gubernatura con la propuesta de asumir el papel del líder que se ausentó del estado hace más de una década.

‘‘El problema mas grave de Oaxaca es que le ha faltado liderazgo, el reto no es el diagnóstico sino su ejecución. El reto de todo líder es que las órdenes se cumplan. En mi gobierno lo haremos. El liderazgo se construye con pasión y con el corazón. Eso es lo que hace la diferencia. Esto se trata del amor a tu tierra, es ver a las familias de Oaxaca como la tuya propia.’’

Murat señala que ‘‘habrá tolerancia cero desde el gobernador hasta cualquier servidor público. Vamos a trabajar de la mano con la sociedad y a institucionalizar la participación por conducto de los consejos ciudadanos. Mediante indicadores de desempeño se va a poder evaluar el ejercicio de todos los servidores públicos, incluyendo secretarios de estado. Tendremos corresponsabilidad para evaluar los recursos públicos, lo que nos permitirá desincentivar este tipo de actos. La transparencia es parte de mi cultura’’.

El abanderado de la alianza PRI-PVEM-Panal cerrará este miércoles su campaña en el Istmo. Murat demanda a sus adversarios respeto a la sociedad: ‘‘Rechazo de manera contundente cualquier acto de violencia o campaña negra. Que ni partidos ni nadie intervenga en la libre determinación de la sociedad para emitir su voto’’, demanda.

–El desarrollo se truncó de una década a la fecha

–Tan sólo en esta administración, 260 mil nuevos pobres. Yo he hecho una campaña de compromisos y hay proyectos estatales que van a empezar a darle ese ritmo al estado para que empiece a tener crecimiento.

‘‘Los dos más importantes, terminar las autopistas Oaxaca-Costa y Oaxaca-Istmo, y después la vía Oaxaca-Tuxtepec. Hay otros proyectos, como la presa Paso de la Reina, Paso Ancho, con la opinión y participación de los ciudadanos; tan sólo ahí se prevén entre 10 mil y 12 mil empleos y más de 2 mil millones de pesos en inversión.’’

Es fundamental –dijo enseguida– detonar el campo oaxaqueño; éste representa 50 por ciento de los ingresos del estado y el problema más grave es que es temporal, es cíclico. Tenemos que transitar en la parte agrícola a la agricultura de valor agregado mediante plantas de procesamiento.

También se propone crear un centro de convenciones. ‘‘Será un centro cultural que incluirá un gran museo para exhibir la obra de artistas oaxaqueños como Tamayo y Toledo, entre otros. Vamos a hacer de Oaxaca la capital cultural de Latinoamérica’’.