Las Águilas hicieron trizas a los Xolos. Les asestaron un despiadado 6-1 y están con un pie en la liguilla, cuando restan cuatro fechas para que concluya el torneo regular de la Liga Mx.

En animado partido en el estadio Azteca, el América despedazó a una jauría fronteriza que quiso alardear de su condición de buenos visitantes.

El técnico Miguel Herrera se sintió en casa con la gran recepción que le hizo la porra americanista al grito de “Oeee, oeee, oe, oe, oe, Piojooo, Piojo…”.

Tijuana no tardó en bombardear la meta local y al minuto 12 dio vida al tablero tras una jugada excelsa conducida por Dayro Moreno, quien hábilmente superó la floja marca local y avanzó por la izquierda para ceder un gran centro al argentino Gabriel Hauche, quien sacó un tiro raso que entró pegado al poste izquierdo.

Herrera, ex timonel del club de Coapa, se guardó para otro escenario sus festejos desmesurados. Apenas dio un aplauso tibio con el gol de su escuadra, pero pronto le cambió el rostro porque las Águilas reaccionaron sin demora y dieron avisos de peligro.

Federico Vilar, cancerbero visitante que varias veces escuchó el “Eeeeh… Puto” que los federativos mexicanos desean erradicar, vigilaba atento todos los misiles. Era evidente que el rol protagónico ahora era del equipo local.

El Piojo empezó a descomponerse y el árbitro se acercó a llamarle la atención al minuto 32. Herrera tenía razón para preocuparse porque al 36 de acción el Cepillo emparejó.

Peralta aprovechó un largo servicio al área y en floja marcación del central Javier Gandolfi y mala salida del portero Vilar remató cómodo con la cabeza para el 1-1 que la tribuna –con aceptable entrada– retribuyó con aplausos.

El atacante confirmó su buena racha al marcar por quinto partido consecutivo.

Los Xolos quisieron recuperar su ventaja. Hauche tuvo la gran oportunidad, pero el portero Hugo González le negó la gloria con una gran atajada.

Tijuana recibió el segundo tanto cuando William da Silva conectó el esférico desde afuera del área, al 41; Gandolfi se barrió y desvió el balón a Vilar, quien ya no tuvo tiempo de reaccionar para decretar la voltereta 2-1.

Para el segundo tiempo el América no dio concesiones. Desde el arranque tomó la iniciativa, se adueñó del balón y los Xolos tardaron 10 minutos en generar peligro. Para tratar de nivelar, el Piojo realizó cambios: Kevin Gutiérrez salió por Gonzalo Díaz, Hauche dejó su lugar a José García y remató con la salida de Juninho por Luis Chávez.

El técnico local Ignacio Ambriz también echó mano de su gente de banca con la entrada de Darwin Quintero por Andrade. Entonces empezó el festín, porque los amarillos ganaron un tiro de esquina (71), en el que Paolo Goltz sorprendió al arrancar desde atrás y rematar con la cabeza para el 3-1 ante un Vilar que se quedó estático.

Al 74 de acción Paul Aguilar evitó el segundo tanto de la visita. Fue un trallazo de Luis Chávez que el defensa rechazó sobre la línea de meta.

Darwin puso el 4-1 al 81 tras avanzar caracoleando, sembró rivales y definir correcto. Un par de minutos después él mismo clavó el quinto. Recibió un gran pase y encaró a Vilar, a quien venció con un tiro bien colocado que arrancó el grito de Oeee, oeee, oe, oe, oe, Daaarwin, Darwin.

El manicomio se estableció en el coloso de Santa Úrsula cuando Benedetto encajó el 6-1 al minuto 88, tras un error de la zaga visitante. El Pipa solamente tuvo que firmar el tanto.

Un enfadado Piojo Herrera comentó: Nos vamos mal. Me molesta tener un equipo de jóvenes y que no se maten en la cancha, que entren y caminen 20 minutos. Fueron muchos goles, el análisis es que se pierde desde el tercero, que cae cuando estábamos jugando mejor. Pasa por no ser contundentes y ellos sí.

Dijo sentirse triste porque no hicimos un partido redondo. Empezamos bien pero luego nos caemos. El primer tanto de ellos es un error nuestro, un titubeo de Vilar, pero dos veces tuvimos el 2-2, aunque pidió no crucificar a su portero y resaltó que mientras tengamos posibilidad matemática (de clasificar) nos vamos a aferrar a ella.

Ambriz, en tanto, se mostró mesurado y precisó que la única palomita que te aplauden aquí es la de ser campeón.

Sin embargo, admitió: Estamos bien con esa inercia, el equipo va embalado, todos andan en buen nivel y estamos en una racha positiva. No hay que echar las campanas al vuelo porque no sabes el futuro; de repente pierdes todo y se espera una liguilla compleja, aunque la goliza fue buena para nuestra afición.

Informó que Moisés Muñoz sufrió un esguince de segundo grado en el tobillo derecho al jugar con la Sub-20, porque quería tener actividad.