Sociedad y Justicia
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Especialistas comparan análisis pagados por la industria con investigación científica

Detectan conflicto de intereses en estudios de gravamen a refrescos

Los trabajos privados reportan disminución de 2 y 2.5 por ciento en el consumo de estos productos; el otro indica 6 por ciento

Hay deficiencias metodológicas en los primeros: experta

 
Periódico La Jornada
Sábado 13 de febrero de 2016, p. 33

Para tomar decisiones sobre los gravámenes que se imponen a refrescos y bebidas azucaradas se requiere información científica. Sin embargo, de los cuatro estudios que se han difundido desde finales de 2015 a la fecha para analizar el impacto del IEPS (impuesto especial sobre producción y servicios) aplicado a estos productos a partir de 2014, tres fueron pagados por compañías y sus resultados evidencian conflictos de intereses.

El cuarto análisis fue realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y la Universidad de Carolina del Norte. Ayer, expertos del comité internacional e independiente que revisaron este estudio presentaron un comparativo de su trabajo con los financiados por el Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo y la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas, los cuales fueron encargados a académicos de la Universidad Autónoma de Nuevo León, el Colegio de México y el ITAM.

Frank Chaloupka, director del Health Policy Center; Sinne Smed, catedrática de la Universidad de Copenhage; Corinna Hawkes, investigadora de la City University London; Mary Story, especialista de la Universidad de Duke, y Carlos Aguilar, del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, explicaron que los resultados evidencian el conflicto de intereses que está detrás de los estudios mencionados. El trabajo del INSP encontró que el impuesto produjo una baja de 6 por ciento en el consumo de refrescos en el país, mientras los otros estimaron disminuciones de entre 2.5 y 5 por ciento.

En el contexto conceptual de los análisis pagados por las refresqueras no se menciona el impacto negativo que tiene el consumo de bebidas azucaradas en la salud, dijeron los expertos. Al revisar dos de ellos, a pesar de que soy experta en el tema, no entiendo lo que hicieron, dijo Sinne Smed, en relación con las deficiencias metodológicas que, según los miembros del comité, no podrían ser publicados en ninguna revista científica arbitrada, debido a falta de calidad, mientras el del INSP apareció en el British Medical Journal.

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Los análisis privados señalan que el impuesto afecta a las personas de menores recursos, lo cual es falso, aseguran especialistasFoto José Carlo González

El IEPS aplicado a los refrescos de un peso por litro demostró su eficacia al disminuir el consumo de esta bebida en dos años, aseguraron, aunque reconocieron que aún hacen falta años de investigación para conocer el impuesto adecuado para disminuir la ingesta de estas bebidas y proteger a la población de la diabetes y obesidad asociados; recomendaron subirlo a dos pesos por cada litro para lograr un mayor beneficio.

Está demostrada la eficacia del impuesto, por eso la Organización Mundial de la Salud lo ha recomendado. Y son simples matemáticas: mientras más grande el impuesto, mayores beneficios, expresó Frank Chaloupka.

La especialista Mary Story subrayó que la aplicación del gravamen no puede ser una medida aislada y que el gobierno mexicano debe implementar más acciones para prevenir la obesidad, como la colocación de bebederos en todas las escuelas.

En tanto, Corinna Hawkes señaló que duplicar el monto del impuesto tendría mayores efectos en los niños, pues son un sector muy sensible al aumento de precios, y es de esperarse que por ello consumirían menos bebidas azucaradas.

Los estudios financiados por la industria, expresaron los especialistas, difunden la falsa creencia de que con la aplicación de este gravamen se afecta a las personas de menores recursos, pues se les quita un producto básico; sin embargo, se ha comprobado que estas bebidas no tienen ninguna aportación nutrimental.