Madrid.

El presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, aseguró ante el juez que investiga las supuestas irregularidades en el fichaje de Neymar que fue su predecesor, Sandro Rosell, quien negoció y lideró la operación, por lo que reiteró que ni el club ni él cometieron falta alguna en la compra del futbolista brasileño.

Bartomeu declaró el viernes en Madrid ante el juez Pablo Ruz como imputado por un supuesto delito fiscal en el fichaje de la estrella sudamericana.

El magistrado de la Audiencia Nacional –principal instancia penal española– investiga si Bartomeu pudo haber cometido un fraude por 2.8 millones de euros en el ejercicio del año 2014 por no entregar a la hacienda pública los impuestos correspondientes a un pago de 5 millones al jugador brasileño relacionado con su fichaje en 2013.

Bartomeu, quien declaró durante tres horas ante el juez, aseguró que la obligación tributaria nace en 2013, cuando se hizo el contrato, aunque el pago de estos 5 millones se realizara en 2014, según fuentes presentes en el interrogatorio.

De esta manera, Bartomeu, quien asumió el cargo en enero de 2014, descarga la responsabilidad sobre su predecesor, Sandro Rosell.

El ex presidente del Barcelona también está imputado en este asunto y la fiscalía ya ha solicitado al juez que se le juzgue por un delito societario y dos delitos contra la hacienda pública.

No obstante, Bartomeu afirmó que los 2.8 millones que se tenían que haber entregado quedaron cubiertos en el pago de 13.5 millones de euros a la hacienda pública española en concepto de regularización voluntaria, el 24 de febrero de 2014, tras estallar el caso Neymar.

En un comunicado, el club aseguró que Bartomeu dejó claro que tanto en su voluntad como en la del club no hubo nunca ánimo de defraudar a la hacienda pública.

El magistrado investiga si el precio del fichaje fue superior a los 57 millones de euros oficiales y pudo haber algún tipo de irregularidad fiscal.

Según la fiscalía, el costo real del fichaje se estima en 82 millones 743 mil 485 euros, divididos en distintos contratos que sirvieron para su fichaje, pero se ocultaron con otros conceptos.

Debido a ello, el Barcelona dejó sin pagar como impuestos un total de 12.14 millones de euros, con lo que el costo total del jugador habría ascendido a 94.8 millones de euros, según la agencia tributaria española.

El traspaso de Neymar, que firmó con el Barça por cinco temporadas en mayo de 2013, originó un gran escándalo cuando un socio del club demandó a Rosell, quien dimitió posteriormente por apropiación indebida en el fichaje.

Por otra parte, tras confirmar que sí hubo un pleito entre Luis Enrique y Lionel Messi, el defensa Gerard Piqué aseguró que en el vestuario se respetan las decisiones del estratega. Manda más que Messi, es el entrenador, es el jefe, manifestó.