Sociedad y Justicia
Ver día anteriorDomingo 25 de mayo de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Falla ley contra violencia en escuelas: CNDH
 
Periódico La Jornada
Domingo 25 de mayo de 2014, p. 30

A pesar de que en Tamaulipas se decretó hace menos de un año una ley para prevenir y erradicar la violencia en las escuelas, esta disposición no se ha llevado a la práctica de forma adecuada, como comprueba el reciente homicidio de un niño en una secundaria de Ciudad Victoria.

Así lo afirmó el primer visitador general de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis García López-Guerrero, quien llamó a no dejar en la impunidad lo ocurrido –con el argumento de que la agresión fue producto de un juego–, e identificar por qué no está funcionando la política gubernamental en contra de ese problema.

Desde que llegó Raúl Plascencia Villanueva a la CNDH (en 2009) manifestó su preocupación por los niveles de violencia en las escuelas del país y llamó a que lo atendieran con diligencia, porque si no llegaríamos a espirales más graves, como las que hoy por desgracia estamos viendo en Tamaulipas y otras regiones del país, lamentó el funcionario en entrevista con La Jornada.

García indicó que recientemente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos reveló que México ocupa el primer lugar mundial en acoso a nivel secundaria, y que en primaria 40 por ciento de los alumnos han sido víctimas alguna vez de robos, insultos o amenazas de sus compañeros.

Fueron este tipo de datos, recalcó, los que llevaron al gobierno de Tamaulipas a promulgar en agosto de 2013 la Ley para la Prevención de la Violencia en el Entorno Escolar, cuyo propósito era evitar casos como los ocurridos en Ciudad Victoria y atender a las víctimas.

Tras enfatizar la necesidad de establecer medidas correctivas para los agresores y definir si hay responsabilidades penales para los directivos de la escuela donde murió el niño, el visitador consideró que el nivel de violencia de los actuales casos están relacionados, en primer término, con lo que viven los menores en sus casas, sumado a los contenidos agresivos que ven en los medios de comunicación.