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Destaca el presidente que el sistema tiene índice de capitalización arriba del estándar global

Sigue bajo el financiamiento de los bancos a la economía, advierte Peña

El crédito otorgado equivale a 28.3% del PIB, cifra inferior que países con menor desarrollo, señala

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Luis Videgaray, secretario de Hacienda, y el presidente Enrique Peña Nieto, este viernes durante la clausura de la 77 Convención Bancaria, en el puerto de AcapulcoFoto Notimex
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Periódico La Jornada
Sábado 5 de abril de 2014, p. 23

Acapulco, Gro., 4 de abril.

El conjunto de bancos que opera en México tiene una solidez que supera los estándares internacionales, pero a pesar de esa fortaleza el nivel de financiamiento que proporciona a la economía sigue siendo bajo, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto, al clausurar la 77 Convención Bancaria.

El presidente Peña Nieto consideró necesario que sean aprovechados los elevados niveles de solidez, solvencia y capitalización del sistema bancario para reactivar e impulsar la economía nacional.

Sin duda, uno de los pilares de la solidez macroeconómica del país es el sistema financiero y, de manera particular, una banca sólida en términos de capitalización y riesgo, dijo. El índice de capitalización –que mide la relación entre el capital neto de una institución y los activos sujetos a riesgo– es de 15.4 por ciento, prácticamente 5 puntos porcentuales arriba del nuevo estándar internacional más estricto, que es de 10.5 por ciento, mencionó, al hablar en un auditorio en que se encontraban los principales ejecutivos de los 47 bancos privados que operan en el país, los directores de la banca de desarrollo y los titulares de Hacienda, Luis Videgaray; y el Banco de México, Agustín Carstens.

Sin embargo, apuntó, a pesar de la fortaleza de su capital, el nivel de crédito otorgado por la banca que opera en México a las empresas y familias sigue siendo bajo. El monto del financiamiento canalizado por las instituciones bancarias equivale a 28.3 por ciento del producto interno bruto, cifra menor, aseguró, a la de países que tienen economías con un grado de desarrollo similar al de México.

En este punto, Peña Nieto mencionó que la reforma al sector financiero, que hace un año en este mismo foro delineó a los banqueros y que fue promulgada el 9 de enero pasado, abrirá nuevas oportunidades de desarrollo a las familias y a las pequeñas y medianas empresas mexicanas, que son las principales generadoras de empleo en el país.

El objetivo, insisto, es que haya más crédito y sea más barato: se trata de aprovechar los elevados niveles de solidez, solvencia y capitalización del sistema bancario, para reactivar e impulsar la economía nacional, dijo. Queremos que los bancos presten más, pero al mismo tiempo se mantengan sólidos, apuntó.

Anunció que en mayo el gobierno federal emitirá la legislación secundaria, derivada de la reforma financiera, para que la Bolsa Mexicana de Valores se incorpore al Mercado Integrado Latinoamericano; en julio, será puesta en práctica una estrategia para evitar la operación de cajas de ahorro irregulares, además de que la Secretaría de Hacienda estipulará los lineamientos para evaluar el desempeño de los bancos, mientras que la Comisión Nacional para la Defensa y Protección de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) hará públicas las normas para erradicar cláusulas abusivas en los contratos de los bancos.

Como se puede apreciar, hay una clara hoja de ruta para implementar eficazmente la reforma financiera y, con ella, impulsar el crecimiento económico del país, dijo.

Hacerlo con prudencia, pide el presidente de la ABM

En la misma ceremonia de clausura, Javier Arrigunaga, quien estará un año más al frente de la Asociación de Bancos de México, dijo al presidente Peña Nieto que la banca es la principal interesada en que el crédito crezca más rápido. Pero también estamos conscientes de hacerlo con prudencia, para que la expansión crediticia sea sostenible y perdurable, apuntó.

Nada más costoso que una crisis financiera o de sobrendeudamiento. Por eso hemos insistido en evaluar nuestros esfuerzos en función del avance de la economía y de su capacidad de pago que, en el conjunto, la define el producto interno bruto, agregó.