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El grupo nació en Bogotá al agotarse la escena en otros sitios; hoy actúa en El Plaza Condesa

La 33, con su multiculturalidad, refrescó a la alicaída salsa

Es una orquesta radicalmente diferente a lo que normalmente conocemos, afirma el productor musical Julio Rivarola

La joven agrupación viene de la tradición de las grandes bandas, pero creció con rock, jazz y otros géneros, explica el crítico Ernesto Márquez

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La 33 se fundó hace 10 años y está conformada por 12 músicosFoto Archivo
 
Periódico La Jornada
Sábado 25 de febrero de 2012, p. 7

Hoy, El Plaza Condesa abre pista con la candente orquesta bogotana La 33, alineación de 12 integrantes que desde sus inicios inyectó energía a la salsa clásica, al aderezar su repertorio con ritmos como el boogaloo, el guaguancó, el latin jazz, el son montuno, la guajira, el funk y el mambo. El invitado especial de esta noche será el grupo Amaxona.

Hace 10 años, Sergio y Santiago Mejía, un par de roqueros, concibieron el proyecto y usaron el nombre de la calle bogotana La 33 para bautizar al grupo, ya que en esa calle se ubicaba su estudio de ensayo, donde idearon contar con una sección de vientos que incluye saxofones rugientes (instrumentos poco frecuentes en una orquesta de salsa clásica) y una aniquilante sección rítmica. De pinta y actitud roquera, su instrumentación y composiciones infiltradas por sus gustos por agrupaciones como Fania All Stars, La Sonora Ponceña, los Van Van y Héctor Lavoe, los han llevado a ser reconocidos tanto en Colombia, como en el resto de América y Europa.

En opinión del productor musical Julio Rivarola, La 33 “es una orquesta radicalmente diferente a lo que normalmente conocemos como orquesta de salsa estándar, género que no ha evolucionado mucho.

“La imagen de los integrantes es como de músicos de hip hop, lo cual ya es distintivo; pero lo que realmente marca una diferencia son los arreglos musicales que imprimen a sus temas: una mezcla radical de salsa tradicional con jazz y rock. Por ejemplo, a mitad de sus shows hacen un arreglo de saxofón con un despliegue de jazz tradicional impresionante. Es una orquesta para bailar y disfrutar, la cual posee una vistosidad escénica y musical muy distinta.”

En 2004, la orquesta lanzó su primer álbum, titulado La 33, de donde se desprendió como primer sencillo La pantera mambo, versión del tema clásico La pantera rosa, de Henry Mancini, el cual los catapultó rápidamente en las listas de popularidad colombianas. Su segundo disco, Gózalo, llegó en 2007, y Ten cuidado, su tercera placa de estudio, se publicó en 2009.

En Colombia han realizado más de mil presentaciones y continúan con su legado musical, en actos masivos o en lugares pequeños. Han compartido escenario con agrupaciones y solistas de renombre, como Buena Vista Social Club, The Wailers, Orquesta Guacayán, Orishas, Willy Colón, Gilberto Santa Rosa, Cheo Feliciano, Chucho Valdez y Alfredo de la Fe, entre otros.

Por su parte, el crítico musical Ernesto Márquez, dice sobre La 33: “Es una de las grandes agrupaciones de músicos jóvenes de la ciudad de Bogotá; los integrantes vienen de la tradición de las grandes bandas, como Fania All Stars, pero que crecieron escuchando rock, jazz y otros géneros musicales; entonces, con esta multiculturalidad y tras agotarse la escena salsera de Nueva York, Puerto Rico y Venezuela, surgen ellos en Bogotá, para refrescar el movimiento salsero, que estaba alicaído.

Además, la mayoría de sus integrantes tienen instrucción académica y componen con un criterio más intelectual, diferente a la salsa de barrio.

Amaxona abre pista

Para aderezar la noche y calentar los ánimos, previo al show de La 33, el grupo Amaxona, formado en 1999 en Baranquilla por siete mujeres, será el encargado de poner a bailar al público asistente. El show de Amaxona brilla por su alegría y la diversidad intrumental, que incluye tambores tradicionales, gaitas indígenas, clarinete, caña de millo y maracas, así como por las voces cálidas y movimientos de cadera, típicos de danzas tradicionales como la cumbia, el mapalé y la puya.

Esta velada se presenta en colaboración con el Festival del Tambor y las Culturas Africanas, este sábado 25 de febrero en El Plaza Condesa. Los boletos están disponibles en las taquillas del inmueble y a través del Sistema Ticketmaster. En el teléfono 5325-9000.