Trípoli, 6 de junio. La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) intensificó hoy los bombardeos aéreos sobre esta capital y otras localidades de Libia, deteriorando aún más las condiciones de vida de civiles, mientras apoya a los rebeldes en su ofensiva contra el líder Muammar Kadafi, y negó que sus tropas bombardearan la radio y televisión estatal.

Fuerzas de la OTAN dispararon contra inmuebles de Trípoli en los que se presume que reside Kadafi, así como otras dependencias del ejército y del gobierno. Fuentes de la alianza atlántica confirmaron una serie de ataques aéreos intensos y sostenidos contra centros de mando y control, numerosas instalaciones de apoyo militar y un depósito de armamento de artillería antiaérea.

Sin embargo, negaron haber atacado la radio-televisión estatal, al precisar que el bombardeo fue contra el cuartel general de los servicios de inteligencia en Trípoli, y reconoció que algunos blancos se encontraban en las mismas zonas que los servicios de radio-televisión.

Un responsable del régimen de Trípoli había afirmado horas antes que la sede de la radio y la televisión estatales fue bombardeada por la OTAN.

Residentes en Trípoli responsabilizaron a los occidentales de la dificultad para aprovisionarse de gasolina y petróleo para sus vehículos. Además, criticaron las restricciones de gas para el consumo doméstico debido a interrupciones en muchas estaciones de suministro, y algunos consideraron que la vida se ha paralizado a raíz del cierre desde hace casi un mes de muchos comercios capitalinos.

Por otro lado, la oposición entró a la ciudad montañosa de Yafran, a cien kilómetros al sur de la capital, y logró expulsar a las fuerzas de Kadafi que asediaron la localidad durante un mes, al tiempo que los alimentos, agua y medicinas comenzaban a escasear.