Nadie está por encima de la ley, y el apellido Coppel no pesará para que se realicen las indagatorias y haya castigos en el caso de las seis trabajadoras que murieron intoxicadas en la céntrica tienda que se incendió durante la noche del martes y la mañana del miércoles, afirmó ayer en Culiacán el gobernador de Sinaloa, Jesús Aguilar Padilla.

Se realiza una investigación con todos los procedimientos periciales para saber bien qué ocurrió, en qué circunstancias y así aplicar todo el peso de la ley hasta las últimas consecuencias a quien tenga responsabilidad, expresó el saliente mandatario, durante en una gira por el municipio de Escuinapa.

A su vez, la Procuraduría General de Justicia estatal informó que en las pesquisas realizadas no se hallaron llaves de los accesos a la tienda incendiada, pese al señalamiento de los directivos de Coppel, de que las seis empleadas fallecidas hubieran podido abrir las puertas y escapar.

Durante las investigaciones y peritajes efectuados en el edificio no han aparecido las llaves de las puertas, ni indicios de que las víctimas las tuvieran en las manos ni guardadas en sus bolsos o atuendos, dijo Martín Robles Armenta, subprocurador de la Zona Centro.

El funcionario contestó así a los directivos de la cadena, quienes afirmaron en un comunicado que la tienda tenía cerradas las cortinas metálicas por razones de seguridad pero el personal podía abrirlas desde adentro, y las ahora fallecidas no estaban encerradas ni había cadenas o candados que les impidieran salir.

No obstante, familiares de las víctimas, trabajadores de Coppel, bomberos y personal de Protección Civil también aseguraron que las puertas y ventanas de la tienda no sólo estaban cerradas por fuera con cortinas de acero sino se carecía de acceso a salidas de emergencia, por lo que fue imposible que se salvaran las seis mujeres, de cuales cinco eran madres que dejan en la orfandad a un total de nueve niños, entre ellos un bebé de 45 días.

Este viernes el gobierno de Aguilar Padilla reiteró su ofrecimiento de apoyo a las familias de las víctimas, y la Comisión Estatal de Derechos Humanos propuso verificar el otorgamiento de la debida protección, así como seguir de cerca las investigaciones, entrevistas, testimonios y acciones periciales efectuados para el esclarecimiento de los hechos.

Se aplicarán multas: STPS

Al respecto, el director de inspectores de la delegación estatal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Rafael Avante Juárez, anunció que se aplicarán multas de 18 mil pesos por cada norma de seguridad y protección civil incumplida por Coppel, por cuya comisión se produjo el desenlace trágico en la sucursal Hidalgo de Culiacán.

El funcionario admitió que la cuantía de las sanciones es una burla, en comparación con las pérdidas humanas y el daño producido, pero recalcó que son las estipuladas en la Ley Federal del Trabajo en materia de seguridad y salud laboral, consistentes en 315 veces el salario mínimo vigente.

Tras el desastre de Culiacán, inspectores de Protección Civil recorrieron la sucursal Coppel en la Plaza Fiesta de Matamoros, Tamaulipas, y exhortaron a la empresa a subsanar en un plazo de 72 horas las fallas de seguridad encontradas con el propósito de no arriesgar a la clientela y a los 76 trabajadores.