París. Un satélite lanzado por el cohete francés Ariane-5 perdió el control inesperadamente poco después de entrar en órbita, comunicó la agencia francesa aeroespacial Eutelsat. Había una fisura en un tanque de combustible, dijo una portavoz de la agencia. Sabemos dónde está y tenemos contacto con él, pero no podremos ponerlo en funcionamiento. Con la pérdida del satélite W3B se suman cinco toneladas más de basura al espacio y se pierden cerca de 347 millones de dólares. Entre las funciones que debía cubrir estaba la de transmitir datos a canales de televisión a Europa, Oriente Próximo, Asia Central, África y el océano Índico. La madrugada del viernes, el satélite fue puesto en órbita y sustituiría a otros tres aparatos que, ahora, después del incidente, permanecerán más tiempo en servicio.