Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER  
Domingo 4 de julio de 2010 Num: 800

Portada

Presentación

“El resto es silencio”
HUGO GUTIÉRREZ VEGA

Un gato de trapo para Carlos
RICARDO YÁÑEZ

Días de guardar con Carlos Monsiváis
MIGUEL HUEZO MIXCO

Respiren aliviados los malditos
JORGE MOCH

1966, el año cero de Carlos Monsiváis
HERMANN BELLINGHAUSEN

Carlos Monsiváis: conciencia y compromiso
JESÚS RAMÍREZ CUEVAS

Sobre Pedro Infante....
ENRIQUETA CABRERA entrevista con CARLOS MONSIVÁIS

Querido Carlos
LUCINDA RUÍZ

Famas póstumas de Carlos Monsiváis
MARGARITA PEÑA

Melancolía de las conversaciones pendientes
ALEJANDRO BRITO

Columnas:
Bemol Sostenido
ALONSO ARREOLA

Cinexcusas
LUIS TOVAR

La Jornada Virtual
NAIEF YEHYA

A Lápiz
ENRIQUE LÓPEZ AGUILAR

Artes Visuales
GERMAINE GÓMEZ HARO

Cabezalcubo
JORGE MOCH


Directorio
Núm. anteriores
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Germaine Gómez Haro

Centro de Las Artes Centenario en San Luis Potosí

En días pasados se presentó el libro Centro de las Artes Centenario publicado por el CNCA y el Gobierno del Estado de San Luis Potosí, una bella edición que registra el proceso de transformación arquitectónica del recinto que fuera la penitenciaría del estado hasta 1994, hoy convertida en un flamante centro cultural. El libro contiene numerosas fotografías realizadas por Eniac Martínez, que dan cuenta del imponente proyecto de intervención que llevó a cabo el arquitecto Alejandro Sánchez, acompañadas de algunas imágenes de archivo que muestran escenas y actividades de los presidiarios, así como algunos planos y bocetos del arquitecto. El volumen bien diseñado e impreso consta de textos de Lucina Jiménez –ex directora del Centro Nacional de las Artes (CENART), del arquitecto Víctor Jiménez y de Adolfo Vázquez Martín, quien fuera director general de Desarrollo Social de la SECULT. Los tres autores hacen una reflexión sobre la importancia de descentralizar la cultura con el fin de generar en el interior de la República opciones para la formación artística que a su vez funcionen como espacios de desarrollo comunitario y participación ciudadana, siguiendo en cada caso las necesidades propias de la región. Con base en estas necesidades se han creado los Centros de las Artes de Veracruz, Baja California, Guanajuato, Zacatecas, Michoacán y, hace un par de años, el magnífico Centro de San Agustín Etla (CASA) en Oaxaca, impulsado por Francisco Toledo.

En 2004 –bajo la égida del entonces secretario de Cultura, Roberto Vázquez– surgió la idea de crear un centro cultural en la capital potosina, aprovechando la extravagante estructura de la cárcel porfiriana que había sido desalojada unos años atrás. La antigua penitenciaría fue edificada en 1890, siguiendo la estructura panóptica desarrollada a partir de las ideas del filósofo inglés Jeremy Bentham, que consiste en una traza en forma de estrella en cuyo centro se ubica la torre de control de los vigilantes. La cárcel potosina es una estructura gemela a la de Lecumberri, “el palacio negro” de nuestra ciudad defeña que fue transformado en los años setenta en el Archivo General de la Nación. El proyecto de remodelación del edificio potosino fue convocado a través de un concurso nacional cuyo jurado –integrado por el artista Francisco Toledo, los arquitectos Víctor Jiménez, Alberto Kalach y Felipe Leal, y el escenógrafo Alejandro Luna– eligieron por unanimidad la propuesta del arquitecto Alejandro Sánchez quien fue, asimismo, galardonado por dicho proyecto con el Premio Francisco de la Maza que otorga el INAH. El reto, sin duda, era superlativo. ¿Cómo transformar una arquitectura destinada al enclaustramiento en un espacio propicio para la creación y el goce físico y espiritual? El gran logro del equipo de Sánchez fue concebir una propuesta que respeta la monumentalidad de la construcción original, interviniéndola con sutileza, humildad (cualidad de la que carecen la mayoría de los arquitectos contemporáneos) y una mirada plenamente contemporánea. Así, el Centro de las Artes de San Luis Potosí cuenta hoy con un espacio integral donde vemos las antiguas crujías oscuras convertidas en luminosas aulas de clase y talleres de pintura, grabado, cerámica, textiles, artes populares, danza, música, teatro, literatura, en fin, múltiples espacios que han renacido para recibir a niños y jóvenes con vocación en el aprendizaje de las artes, formación que tanta falta hace a nuestra sociedad imbuida en los valores materiales. El Centro cuenta también con un foro al aire libre con capacidad para más de mil 500 personas donde se presentan conciertos, espectáculos y artes escénicas. Se puede pasear por los muy disfrutables jardines entre cactáceas representativas de la flora regional y admirar las esculturas que se reflejan en un hermoso espejo de agua. Hay una biblioteca de arte y una galería ubicada en una portentosa nave de cañón corrido donde se exhiben muestras temporales. Actualmente, y hasta el mes de agosto, se presenta la exposición Tres × tres, un proyecto curatorial de Florencia Riestra que reúne a tres artistas gráficos –Marisa Boullosa, Artemio Rodríguez, Joao Rodríguez–, tres escultores –Maribel Portela, Juan Vicente Urbieta, Rivelino Moreno–, y tres pintores –Álvaro Castillo, Franco Manterola y Pablo Rulfo.

Da gusto constatar cómo un proyecto bien concebido desde sus orígenes y con un objetivo claro y certero se consolida en un espacio admirable que seguramente dará muchos frutos en la formación de futuros artistas, y propiciará diálogos e intercambios culturales importantes para la sociedad potosina en general.

Para conocer el nutrido programa de actividades de este Centro visite la página www.centrodelasartesslp.gob.mx.