Sábado 6 de agosto de 2022, p. 20
Matagalpa. La policía de Nicaragua acusó ayer a la Iglesia católica y al obispo Rolando Álvarez, sitiado por las fuerzas de seguridad desde hace dos días en la curia, de “incitar al odio” para desestabilizar el país y anunció la apertura de una investigación contra lo que consideró “actos delictivos”. “Las altas autoridades de la iglesia católica, Diócesis de Matagalpa, encabezada por José Rolando Álvarez, (..) están intentando organizar grupos violentos e incitándolos a ejecutar actos de odio en contra” el gobierno, dijo la policía en un comunicado. Álvarez, crítico del gobierno de Daniel Ortega, denunció ayer que la policía tiene sitiada la curia.