Diseñados para atraer a consumidores menores de edad, los nuevos sistemas electrónicos para la administración de nicotina, como cigarros electrónicos y vapeadores, representan un alto riesgo para la salud de niñas, niños y adolescentes, alertan especialistas.

Según datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), el uso de vapeadores entre adolescentes y jóvenes aumenta el consumo de cigarros convencionales y los expone a un mayor riesgo de ser usuarios crónicos o dependientes a la nicotina.

Al respecto, Erick Ochoa Antonio, presidente de Salud JustaMx, consideró que mantener la prohibición a la importación de cartuchos de tabaco calentado beneficiará la salud de millones de niños y adolescentes.

En un posicionamiento, tras la decisión del Senado de aprobar reservas a la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación, con lo que se mantienen las restricciones para los nuevos productos de tabaco y nicotina, destacó que, pese al fuerte cabildeo de la empresa tabacalera Philip Morris –principal fabricante y comercializadora de cigarrillos electrónicos en México–, de no haberse aprobado las reservas, se hubiera potenciado la adicción al tabaco de millones de niñas, niños y adolescentes.