Madrid. Estados Unidos apoya con mente abierta los esfuerzos del nuevo enviado especial de la Organización de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental, Steffan de Mistura, para encontrar una solución que permita una vida digna para la población, aseveró ayer la subsecretaria de Estado, Wendy Sherman. Estados Unidos y España quieren un resultado positivo para el pueblo del Sáhara Occidental, dijo durante su visita a Madrid, previa a su desplazamiento a Rabat y Argel. La administración de Joe Biden no ha dado formalmente marcha atrás a la decisión de su predecesor Donald Trump, quien en diciembre de 2020 reconoció como marroquí el Sáhara Occidental después de que Marruecos restableció relaciones con Israel.