Mundo
Ver día anteriorDomingo 7 de febrero de 2021Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Hoy, elecciones en Ecuador

El correísta Arauz busca ganar en la primera vuelta

Los candidatos opositores pretenden obligar a una segunda votación, a realizarse el 11 de abril

Foto
▲ Trabajadores del sistema electoral de Ecuador trasladan las boletas que se utilizarán este domingo en los comicios presidenciales. Para que un candidato gane debe obtener 40% de los votos y superar a su rival más cercano por al menos 10 puntos.Foto Ap
Foto
▲ Las encuestadoras señalan como favorito a Andrés Arauz. En caso de una segunda vuelta sería entre Arauz y uno de los dos candidatos que le siguen. De 2015 a 2017 fue ministro coordinador de Conocimiento y Talento Humano durante la presidencia de Rafael CorreaFoto Ap
Página 12
Periódico La Jornada
Domingo 7 de febrero de 2021, p. 18

Quito. Ecuador se encuentra a la espera de la contienda electoral del domingo, que será determinante para los próximos años en el país. Cada uno de los tres candidatos que encabezan las encuestas cerró sus actos de campaña el jueves en sus lugares de origen político: Andrés Arauz, en Quito; Guillermo Lasso, en Guayaquil y Yaku Pérez, en Cuenca. Ese orden de preferencias es el que arrojaron la mayoría de las encuestas durante las semanas recientes. Se sabe que existen márgenes de error, fenómenos como el voto oculto, porcentajes de indecisos y cálculos políticos que pueden marcar determinadas encuestas en un escenario donde el debate es si habrá una segunda vuelta.

Una conclusión emerge de todas las encuestadoras: en caso de que efectivamente haya segunda vuelta, que sería el 11 de abril, sería entre Arauz y uno de los dos candidatos que le siguen. No existe, según los actuales números, una posible segunda vuelta que enfrente a Lasso y Pérez, segundo y tercero en las encuestas.

Lasso es una figura prototipo de la derecha latinoamericana: banquero, enriquecido en la crisis de 1999 en la cual su patrimonio de un millón de dólares declarados pasó a 31 millones, mientras millones de ecuatorianos se empobrecieron y emigraron del país. Está asociado a 49 empresas en paraísos fiscales y es director de la fundación Ecuador Libre que forma parte de la red Atlas Network, en la cual se aglutina gran parte de la derecha latinoamericana y española, con terminales en Estados Unidos.

Su relación y proyección con Estados Unidos es, tal vez, el único tema en el contexto de la campaña en que se expresa con claridad. Al responder sobre su política de relaciones internacionales afirma: Nos acercaremos a países como Estados Unidos, históricamente es nuestro principal amigo, utilizamos su moneda. Los ecuatorianos cuando quieren viajar quieren ir a Estados Unidos en primer lugar, cuando quieren estudiar van a Estados Unidos principalmente, cuando les va mal en Ecuador quieren vivir en Estados Unidos, un país de oportunidades. Es nuestro principal socio comercial, buscaremos un acuerdo de libre comercio.

Lasso elaboró un discurso de promesas electorales que poco se acerca al programa neoliberal que busca llevar adelante: empoderamiento económico de las mujeres, paridad de género, educación gratuita, agua potable, alcantarillado, aumento de los salarios de 400 a 500 dólares, 2 millones de empleos y un plan de vacunación de 9 millones de personas en los primeros 100 días. Su plan de gobierno, sin embargo, es otro. Tiene, por ejemplo, entre sus puntos centrales una reforma del código laboral, así como la derogación de la Constitución de 2008.

En cuanto a la revolución ciudadana, su ataque se basa en dos ejes centrales. En primer lugar, retomar la noticia falsa de la Revista Semana, de Colombia, donde se afirmó que la campaña de Arauz había recibido financiamiento del Ejército de Liberación Nacional colombiano. En segundo lugar, un ataque al socialismo del siglo XXI que, según Lasso, llevaría 14 años en el país, es decir bajo los dos mandatos de Rafael Correa y el de Lenín Moreno, a pesar, en este último caso, de su giro explícito a un programa neoliberal.

Es en la crítica a los gobiernos de Correa y de Moreno donde los discursos de Lasso y de Pérez se encuentran públicamente. El candidato del partido Pachakutik, fundado en la década de los 90 del siglo pasado de la mano de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), sostiene que los gobiernos de la revolución ciudadana fueron la década del saqueo en vez de la década ganada.

La distancia entre la Conaie y el correísmo no es nueva, algo que quedó expresado recientemente, por ejemplo, en el levantamiento indígena y popular de octubre de 2019 ante el intento de ejecución de un plan de ajuste de Moreno como parte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. En aquella oportunidad, la dirigencia de la Conaie, que condujo protestas que fueron violentamente reprimidas, mostró un enfrentamiento abierto con el correísmo que quedó expresado en la mesa de negociación entre el movimiento indígena y Moreno.

Lasso, con un proyecto de profundización neoliberal, y Pérez, quien se presenta como un dirigente de extracción popular, de izquierda, indígena, con énfasis en la dimensión medioambiental, son entonces la segunda y tercera fuerza en disputa en las elecciones del domingo. Las encuestas indican que uno de los dos sería quien iría a segunda vuelta, en caso de que suceda. Lasso ha afirmado que apoyaría a Pérez en caso de que éste llegara a la segunda vuelta, un mensaje al que el candidato de Pachakutik respondió desmarcándose, pero sin aclarar cuál sería su posición en caso de que Lasso llegara a segunda vuelta.

La otra opción para el domingo, que se encuentra sobre la mesa, es una victoria en primera vuelta de Arauz, algo que el candidato de revolución ciudadana afirma que puede suceder, para lo cual debería alcanzar 40 por ciento de los votos con 10 puntos de diferencia sobre el segundo.