Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cerró ayer la campaña del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), a unos días de los comicios legislativos, restando importancia a las declaraciones del gobierno de Estados Unidos, el cual advirtió que desconocerá el resultado.

Ahí salió el moribundo gobierno de Donald Trump diciendo que ellos no van a reconocer el resultado de las elecciones del próximo 6 de diciembre. Nosotros desde Caracas le decimos que no nos importa lo que diga el imperio estadunidense, sostuvo el mandatario venezolano.

El gobierno de Estados Unidos se ha referido a los comicios parlamentarios en Venezuela como un fraude e incluso ha instado a la población a no participar.

Ante seguidores y durante un acto en el centro de Caracas, Maduro destacó que en este proceso sólo importa lo que diga la población venezolana, por conducto de su voto, y no las amenazas de Washington.

Imagínense si en pleno siglo XXI Venezuela se dejara tratar como si fuera una colonia. La inmensa mayoría sabe que Venezuela pertenece a los venezolanos y somos nosotros los que decidimos nuestro futuro, apuntó el gobernante, quien llamó a la ciudadanía a acudir a votar.

En medio de las crueles sanciones hemos defendido la salud pública y hemos garantizado el tratamiento gratuito a todos los enfermos de Covid-19; nosotros hemos continuado con la construcción de viviendas, hemos protegido y defendido a nuestro pueblo con las misiones (programas) sociales, indicó el presidente.

Mientras, el enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, en entrevista con la agencia de noticias Reuters, pidió al futuro gobierno de Joe Biden que use la influencia que cree que se ha obtenido con las sanciones para desalojar del poder a Maduro.