Desde 2009 y hasta julio del presente año, efectivos de la Secretaría de Marina (Semar) han sostenido 247 enfrentamientos con grupos de la delincuencia organizada, en los cuales han muerto 528 civiles, un promedio de cuatro por mes, clasificados por la dependencia como infractores fallecidos.

En lo que va del presente gobierno, el número de confrontaciones armadas en las que intervino la Marina es de 16, con 21 civiles fallecidos, menos de uno por mes.

Fuentes de la Semar explicaron que esta disminución se debió a la reducción de sus operativos de alto impacto en tierra, pues se concentraron en el mar, donde los enfrentamientos suelen ser menos frecuentes.

No obstante, la Armada ocupa el lugar número 11 entre las dependencias del gobierno que más expedientes abiertos tienen por quejas ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), con un total de 170.

Apenas la semana pasada, emitió una recomendación a la Semar por la desaparición forzada y ejecución de cuatro personas ocurrida el año pasado en Puebla, la cual ya fue aceptada y los presuntos responsables fueron puestos a disposición de las autoridades civiles.

Según el reporte entregado por la Semar, en respuesta a una solicitud de información pública, 2017 fue el año en el cual más civiles perdieron la vida durante enfrentamientos armados con personal naval, un total de 136 en 50 confrontaciones. El informe no da cuenta del número de marinos que también fallecieron en esos operativos.

La solicitud incluía la petición para conocer las cifras correspondientes al periodo 2006-2008; sin embargo, la Semar respondió que en cuanto a esos años, cuando inició la guerra contra las drogas, anunciada por el entonces presidente Felipe Calderón, no hay registro en su base de datos.

Entre 2009 y 2012, los integrantes de la Armada abatieron a 77 presuntos integrantes de organizaciones criminales en 22 enfrentamientos, ninguno fue herido y hubo 29 detenidos.

Durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, de 2013 a 2018, la Semar reportó el fallecimiento de 441 personas en 209 enfrentamientos con sus uniformados, hechos en los cuales resultaron heridos 20 civiles y 151 detenidos.

En la presente administración los choques entre marinos y civiles armados han disminuido, pese a los cambios legales que han ampliado la actuación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública.

Así, durante los últimos cuatro meses de 2018, al inicio del actual gobierno, reportó tres confrontaciones en las que murieron cuatro personas, sin heridos.

En 2019 hubo siete enfrentamientos con cuatro agresores muertos y uno herido, mientras de enero a julio de 2020, en seis escaramuzas fueron abatidos tres civiles agresores, ningún herido y 26 detenidos.