Aunque se dejó fuera del periodo extraordinario de sesiones la discusión sobre la reforma a la Ley Federal de Variedades Vegetales (LFVV), la Campaña Nacional Sin Maíz no hay País, señaló que continúa convocando a expresar nuestro rechazo a la propuesta.

Por ello reiteró su llamado a los legisladores a no dictaminar la iniciativa y abrir un espacio plural y amplio de cara a la sociedad para escuchar y debatir propuestas sobre acciones del Estado para la efectiva protección de los derechos y el cuidado de la naturaleza.

Destacó que dados los señalamientos realizados por el diputado Eraclio Rodríguez, queremos hacer saber que la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País continúa trabajando e informando a comunidades, a los pueblos originarios y campesinos, a las organizaciones sociales, y a todas las personas interesadas en la alimentación sana, acerca de las graves consecuencias que traería la aprobación de esta ley.

Aseguró que es una red de organizaciones sociales, campesinas, indígenas, defensoras de derechos humanos, ambientalistas, de mujeres y jóvenes, que incluye también especialistas en diversas disciplinas, que hemos luchado desde hace más de 10 años, por la revaloración de la agricultura campesina, por la protección y el fomento de nuestros maíces desde la milpa.

La campaña destacó que se debe construir y consolidar otro modelo agroalimentario y nutricional que ponga en el centro de las políticas públicas a las y los productores de pequeña y media escala, a los indígenas, y el cuidado de la naturaleza para lograr dejar atrás el modelo agroindustrial impuesto hace más de 30 años que ha causado estragos dolorosos para el campo y las familias campesinas e indígenas.