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Ver día anteriorMartes 3 de marzo de 2020Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Para que quede claro

Del norte (MLS) hay que aprender

L

a Major League Soccer, o simplemente la MLS, inició el pasado fin de semana su temporada 25, y aunque hay muchos que todavía lo dudan, yo quiero decirle que, desde mi punto de vista, este es el principio de una batalla que, creo, la Liga Mx está condenada a perder.

Lo anterior sucederá irremediablemente a menos que, (otro que), como sugirió en lo que fue visto como un arranque de locura del presidente de la Liga Mx, Enrique Bonilla, la Federación Mexicana de Futbol empiece a planear y a plantear a los americanos la existencia de una liga en común, más allá de la Campeones Cup, la Concachampions, y el hecho de que encuentros como el Campeón de Campeones se juegue en suelo estadunidense.

Quiero insistir en que tal vez mucha gente me llame exagerado, pero el 1-2 de brutales dimensiones que nos asestaron como aficionados al futbol mexicano el pasado fin de semana sí dolió –y apenas fue la jornada uno–, porque nadie se ha tomado la molestia de, valga la redundancia, tomar en serio el proceso de consolidación y expansión que hoy tiene la MLS, que tal vez no posea los mejores equipos (y ¿quién sabe, eh?), pero ya nos está alcanzando en el promedio de asistencia, según dato de mi querido y admirado amigo Héctor Huerta.

El partido entre el Galaxy de Los Ángeles y el Houston Dynamo, con la presencia del capitán Javier Chicharito Hernández, atrajo altísimos niveles de audiencia en televisión en Estados Unidos y ¡en México!... Y un día después, la presencia de otro capitán, el de Los Ángeles FC, Carlos Vela, dándole la bienvenida al Inter de David Beckham, tuvo a la otra mitad de México viendo el partido donde Diego Alonso mandó a la cancha a Rodolfo Pizarro, sí, el del escándalo de Monterrey, Chivas y demás…

Y era la primera jornada. Y hubo quienes seguimos el partido del San José de Matías Almeyda, que empató a dos con un tanto de Oswaldo Alanís, y hasta el del Kansas City, que abrió su temporada goleadora con nuestro vigente campeón anotador Alan Pulido, venciendo 3-1 al Vancouver.

Por cierto, ¿sabía que a Pizarro lo llevó a Estados Unidos la misma empresa que puso a Héctor Herrera en el Atlético de Madrid?... ¿Y que esa empresa tiene firmados a 18 jugadores mexicanos menores de 20 años y casi la mayoría de seleccionados nacionales con límite de edad, de casi todos los equipos de la Liga Mx?

La MLS inició su temporada con dos franquicias de expansión, Miami y Nashville; tiene 26 escuadras y dentro de dos años crecerá hasta 30, algo que ni de forma remota podría darse en estos tiempos en la Liga Mx. Más aún, hoy la MLS es la décima del mundo en ingresos, mientras la de nuestro país está en el sitio 16, y eso que esta inofensiva liga sólo tiene 25 años de vida y estaba casi muerta a principios de este siglo.

Por si usted no lo sabía, las cosas estaban tan mal en la MLS que los derechos de transmisión de los Mundiales de 2002 y 2006 tuvieron que ser comprados por la liga y luego revenderlos por debajo de su valor para que la gente viera futbol internacional de primer nivel y ayudar al good will en el proceso de expansión.

Una franquicia de la MLS como Chivas USA se vendía entre 3 y 10 millones de dólares; Jorge Vergara pagó la segunda cifra, hoy esas franquicias valen 45 millones de dólares, sólo tres o cuatro del futbol mexicano valen más y tenemos que hablar de Chivas o América… No hablamos del costo de los jugadores, sino el valor del equipo.

Beckham apostó por construir un estadio en Miami para el Inter, que costó 996 millones de dólares. En México no hay un estadio que valga eso. Ni siquiera las ruinas del Azteca. Lo cual habla de que, aunque los mercados sean diferentes, allá sí ha habido expansión y en México contracción hasta en el número de franquicias en primera o segunda división.

Sabía usted que en la MLS juegan más de 100 elementos surgidos de la Academia de la MLS. ¿Qué es eso? Las fuerzas básicas pagadas por la liga, que aquí son un caso de miseria pública vergonzosa. Con estos apenas algunos argumentos, ¿cree usted que necesitamos o no aprender de lo que están haciendo los primos?... Esta historia continuará...