Monterrey, NL., Los más de 6 mil reos de los cuatro penales de Nuevo León cumplen condena sin que las autoridades penitenciarias les brinden atención médica óptima y educación, y aquellos que trabajan no cuentan con prestaciones dignas, dio a conocer la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).

Este lunes el organismo presentó su Diagnóstico de la situación penitenciaria del estado 2018-2019. Un enfoque desde la reinserción social, que analiza la situación de 6 mil 634 presos.

Sofía Velasco Becerra, presidenta de la CEDH, dijo que gracias a la ampliación del Centro de Reinserción Social de Apodaca tras el cierre del penal de Topo Chico, no existe sobrepoblación penitenciaria, ya que se cuenta con espacios para 8 mil 527 personas.

Hay mucho que hacer en salud, en trabajo, para que tengan condiciones de vida dignas, las cuales son mejores ahora en Apodaca que en Topo Chico. No toda la población trabaja, dijo Velasco.

En el tema de salud, la investigación arrojó que hacen falta sicólogos, ginecólogos y cardiólogos para atender a la población penitenciaria, pues el estado cuenta sólo con 108 médicos especializados.

Velasco Becerra recalcó: Ya en otras recomendaciones habíamos pedido que hubiera suficiente personal médico capacitado. Hay enfermedades que no son debidamente atendidas; no hay políticas de prevención ni detección oportuna de enfermedades. Incluso una persona murió.

La CEDH exhortó a las autoridades estatales a presentar un plan para atender la depresión entre las personas recluidas, crear programas de prevención y tratamiento de adicciones, así como elaborar un registro de enfermedades que padecen los internos.

En el diagnóstico de la situación penitenciaria, el organismo también detectó que los internos que trabajan no cuentan con prestaciones ni tienen horario.

Sofía Velasco solicitó al gobierno del estado gestionar seguridad social y prestaciones de ley para esos reos y diseñar planes de educación individualizados y capacitación laboral para quienes aún no tienen empleo.

En 2018 la CEDH emitió dos recomendaciones para el gobierno de Nuevo León, encabezado por Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, relacionadas con el sistema penitenciario. En el presente año suman cinco; además, se han recibido más de 100 quejas relacionadas con amenazas y cobros entre internos, así como malos tratos por parte de los custodios.