A dos años del sismo que causó la muerte de 26 personas, entre ellas 19 niños, por el derrumbe de una parte del colegio Enrique Rébsamen, padres de familia y representantes legales exigieron justicia y que autoridades del gobierno capitalino sean llevados a juicio, porque hasta el momento sólo se encuentra en prisión un director responsable de obra.

En entrevista, Enrique Fuentes, representante legal de los padres de siete niños que murieron, insistió en la exigencia de justicia, tras precisar que no es suficiente con la detención de la dueña y directora del colegio, Mónica Villegas, quien se entregó a las autoridades en mayo pasado.

A pesar de que hay contacto con las autoridades de la Procuraduría General de Justicia, Fuentes dijo que faltan por cumplir otras dos órdenes de aprehensión en contra de otros dos directores de obra y de autoridades de la entonces delegación Tlalpan, de la Secretaría de Obras, de Desarrollo Urbano y Vivienda y de la secretaría de Educación Pública, porque existe documentación que alertaba de riesgo de colapso en el colegio.

Una justicia lenta es una justicia denegada, comentó, al referir que esta mañana se realizará una misa para recordar a los niños.

Por su parte, la Barra Mexicana de Abogados, que representa a los familiares del resto de las víctimas, expuso que van dos años buscando justicia entre los escombros y poco hemos avanzado, porque a la fecha “la justicia sólo ha alcanzado a particulares y no a funcionarios.