Sociedad y Justicia
Ver día anteriorViernes 10 de mayo de 2019Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Las madres
El cerebro se reorganiza con la gestación para mejorar procesos cognitivos
 
Periódico La Jornada
Viernes 10 de mayo de 2019, p. 35

Cuando una mujer se embaraza su cerebro reorganiza las redes neuronales para mejorar los procesos cognitivos, así logra una atención selectiva y una memoria más eficiente, situación que la prepara para ser mamá, afirmó Eduardo Calixto González, profesor de la Facultad de Sicología de la Universidad Nacional Autónoma de Mé-xico (UNAM).

Dicho proceso se acompaña por el aumento de algunas hormonas como la progesterona (que mitiga el dolor físico) y los estrógenos, añadió el también jefe del Departamento de Neurobiología del Instituto Nacional de Psiquiatría.

Con esto, el cerebro femenino está listo para tener mayores actividades relacionadas con los cuidados de los hijos. De hecho, aprenden en tiempos más cortos y a la primera, por ejemplo, a cocinar. Es así que se garantiza el cuidado del ser humano y se disminuyen los riesgos de la vida del bebé.

Después del primer embarazo, una mujer tiene una madurez neuronal que difícilmente se observa en otra etapa, y eventualmente se da un proceso para una mejor toma de decisiones. Se trata de un periodo donde se incrementa la percepción de varias motivaciones emocionales y eventos que el cerebro selecciona para generar memorias.

Si aterrizamos esto en la vida cotidiana de una madre, veremos que nunca se le va a olvidar cómo cargar a su hijo, cambiarlo, abrazarlo e incluso pasar el conocimiento a las siguientes generaciones.

Al embarazarse y tener un bebé, las mujeres obtienen cambios en la comunicación de las neuronas que las lleva a una madurez cerebral, por ejemplo, olvidan los pensamientos egoístas, se protegen más y cuidan al hijo.

Apego hormonal

Pero este proceso no es un fenómeno aprendido, sino que se debe a la oxitocina, una hormona que segrega el cerebro de las madres y les brinda apego a su bebé. Mientras el pequeño interacciona con la madre, se da una retroalimentación positiva; al cargarlo y alimentarlo se le estimula para favorecer la organización neuronal de su cerebro.

De acuerdo con Calixto González, durante esta etapa el sistema inmunológico detecta células que no son suyas, y para permitir un feliz embarazo se da una inmunosupresión fisiológica (disminución de la respuesta inmunológica del organismo).

En consecuencia, cambia la percepción de lo que comen y huelen, y por eso surgen las náuseas a ciertos alimentos. Además, la percepción del oído y la vista se agudizan, e incluso el sueño aumenta.