Botellita de Jerez instó a sus seguidores de ambos sexos a no caer en provocaciones y polarizaciones, luego del doloroso deceso, hace una semana, de Armando Vega-Gil.

Consideramos, puntualizaron los integrantes de la banda de rock, que haber terminado con el proyecto de Botellita de Jerez queda en segundo plano respecto de un tema fundamental: avanzar en los esfuerzos para deponer la violencia en contra de las mujeres.

Asimismo, “respetamos la decisión que tomó en un momento crítico y muy agudo de su existencia (Vega-Gil), pero queremos enfatizar que ni la causa feminista ni el movimiento #MeToo son culpables de su suicidio. Como lo dejó en claro en su carta de despedida, misma que escribió con total responsabilidad y conciencia: ‘no se culpe a nadie de mi muerte’. Esta expresión no debe ser soslayada, sino asumida como un deseo genuino y patente de Armando”.

Por la paz y el buen trato

Francisco Barrios El Mastuerzo, Santiago Ojeda y Rafael Sr. González enfatizaron: nos oponemos resueltamente a la violencia contra las mujeres, expresada en acoso, hostigamiento, violaciones y bárbaras expresiones de misoginia, como los nefastos feminicidios. Nos sumamos a ideas compartidas por muchos mexicanos y mexicanas: desterrar las violencias de género, superar los machismos de hombres y mujeres, favorecer la equidad de género y abonar a la construcción de una cultura de paz y buen trato.

Además, propusieron que se realice una seria reflexión en torno al suicidio en general. Privarse de la propia vida, es un acto que en sí mismo no representa cobardía o valentía; tampoco es una falsa salida ni necesariamente es consecuencia de severas alteraciones emocionales.

El suicidio de un personaje público, concluyeron, no puede generar emulaciones ni un #MeToo hombres.