La noche de Día de Muertos la pintora Frida Kahlo hace un autorretrato hablado sobre su vida, en el cual evoca sus alegrías, amores y pasiones acerca del tortuoso destino del que se burla y al que logra sublimar haciéndolo arte.

En el foro Bellescene, la actriz Ana Karina Guevara encarna a la artista gráfica y lleva a los espectadores a un ir y venir en su biografía a través del montaje unipersonal Kahlo, viva la vida, del dramaturgo Humberto Robles, dirigido por Pilar Boliver.

El espectáculo trata de separar a Frida de la imagen comercializada y de los folclorismos exacerbados que existen alrededor de la pintora, explicó Guevara, quien dijo que también se abordan aspectos sobre el proceso artístico y la postura ideológica, que se complementan con música de la época y frases mordaces e ingeniosas de Kahlo.

En escena, Guevara interacciona con el público, haciéndolo parte de la historia para mostrar a una Frida más íntima y auténtica que devela su amor, pasión y delirio por Diego Rivera, así como su alegría de vivir y su lucha constante con la muerte, que la ronda a cada rato.

Frida Kahlo “es todavía un personaje icónico en la cultura del país y en el mundo. Para esta obra –Boliver y yo– quisimos mostrar a la pintora desde el lado íntimo y humano, es decir, donde el personaje pueda ser tierno o enamorado, pero también hace rabietas o interpreta sus canciones mexicanas favoritas.”

Así, la artista festeja con la muerte y el propio espectador, a quien hace cómplice de su fascinante y controvertida vida.

Guevara puntualizó: Se adelantó a su época, no puso etiquetas en su estilo de pintar, tampoco en su manera de vivir ni de amar. Fue un espíritu libre que a pesar de sufrir dolores fuertísimos durante años vivió con intensidad cada momento.

Se presenta los sábados 16, 23 y 30 de marzo y 6, 13, 20 y 27 de abril a las 19:30 horas, en Bellescene, Zempoala 90, colonia Narvarte.