La Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó ayer multar al partido Morena con 197 millones de pesos por no informar sobre la creación de un fideicomiso para apoyar a los damnificados y porque 64.4 de 78.8 millones de pesos recaudados fueron a parar a manos de 56 personas de esta fuerza política, si bien no hay pruebas de que los recursos se hayan canalizado a las campañas y por tanto no serán contabilizados como gastos para esa etapa de proselitismo.

La instancia del INE también decidió sancionar al PRI con 36.5 millones de pesos por el desvío de recursos del gobierno de Chihuahua a ese partido en 2015, y al PAN con 3 millones por haber recibido 1.5 millones de pesos, de una persona moral, que fueron a la precampaña de Ricardo Anaya, lo que está prohibido por la legislación electoral.

En el caso del fideicomiso de Morena para apoyar a los damnificados por los sismos, Ciro Murayama, presidente de la Comisión de Fiscalización, explicó que también se sancionó a Morena porque del dinero recaudado, 44 millones provinieron de depositos en efectivo, lo que no está permitido por la legislación electoral. Aunado a ello se detectó que hubo aportaciones de personas desconocidas y de empresas mercantiles, también prohibido por la norma. Se trata de una conducta grave, subrayó.

Ante la posición de la dirigencia de Morena en torno a que el INE no debería revisar ese fideicomiso ya que no ingresaron recursos públicos, Murayama aceptó que no entró dinero del erario, pero fue financiamiento privado en parte de origen desconocido y en parte de personas morales, y por tanto es ilegal.

Si bien los partidos pueden crear fideicomisos, explicó que deben enterar a la autoridad de ello. Además esto tiene que ser para otro fin que no sea para los damnificados, pues si bien esa es una tarea encomiable, se puede volver una dádiva. Los partidos no deben entregar ni dinero ni bienes a la población, explicó al salir de la sesión en la que la comisión aprobó las tres sanciones que serán analizadas y eventualmente aprobadas por el Consejo General del INE el 18 de julio próximo.

El consejero insistió en que lo del fideicomiso tuvo un comportamiento de manera atípica desde su origen y si ello se permitiera, quedarían vulneradas las obligaciones de fiscalización y rendición de cuentas de los partidos, pues se abriría espacio para que éstos abrieran cuentas de financiamiento paralelas.

Luego de informar que se dará vista del tema del fideicomiso al Servicio de Administración Tributaria, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales y a la Unidad Técnica de lo Contecioso Electoral del INE, rechazó que haya habido retraso en el desahogo del asunto, pues apenas el sábado pasado llegó el proyecto a los consejeros.

Por lo que hace al caso del PRI, expuso que la Secretaría de Hacienda de Chihuahua canalizó en 2015 a esa fuerza política 14.6 millones de pesos a partir de un esquema en el que se simularon donaciones voluntarias de los trabajadores. El desvío ocurrió en tiempos del gobernador César Duarte.

Sobre el PAN, Murayama agregó que en Huixquilucan tres personas hicieron trasnferencias en efectivo por 500 mil pesos cada una a la cuenta del blanquiazul, y de ahí se canalizaron a la contabilidad del precandidato Ricardo Anaya, pero se encontró que los recursos en realidad provenían de una persona moral, lo cual no es permitido por la ley.