Odebrecht: embarran a Calderón; lo niega
Débil defensa de México en la ONU
Estanflación: inflación con depresión
¿Salinas, al PRI?
Murat, Zamora, Ruiz Massieu
Jaque a Ochoa Reza
Brotan más precandidatos
a 2018
De gasolinazo a tarifazo
Reforma cumplidora
Bienestar para la familia
Investigaciones recientes avanzan en la comprensión del bienestar humano/ V
Ian Gough y coautores, visión interdisciplinaria del bienestar en países pobres
Cardenal: sacerdote y poeta incómodo
Eurojazz y New York Jazz All Stars
Lo electrizante de 2016 (hip-hop / R&B, II)
a situación del secretario de Justicia (o fiscal general) de Estados Unidos, Jeff Sessions, alcanza un grado de escándalo y desfiguro que hasta hace poco tiempo habría sido inimaginable en ese país. Para empezar, el ahora funcionario se reunió en secreto en dos ocasiones, cuando era parte del equipo de campaña de Donald Trump, con el embajador de Rusia en Washington, Sergei Kislyak, justo cuando el país se veía sacudido por el escándalo de las intercepciones electrónicas de los correos de la candidata rival, la demócrata Hillary Clinton. Posteriormente se dio a conocer que Sessions había mentido ante el Senado al ocultar esos encuentros.
Campaña contra la prueba PISA
gradecemos los comentarios del profesor Mares Gallardo sobre la campaña internacional que estamos realizando contra la prueba PISA, demandando la anulación de los contratos que los diversos gobiernos han firmado con la OCDE. Asimismo, exigimos el término de las pruebas estandarizadas de altas consecuencias a escala nacional. ¿Cuáles son las razones? PISA es una prueba estandarizada hecha cada tres años a estudiantes de 15 años. Su primera aplicación fue en el año 2000, se han incorporado más de 70 países. Para poder participar, cada país debe contar con un equipo técnico especializado y pagar por su aplicación. Actualmente la OCDE, que aplica la prueba PISA, ha contratado a una corporación transnacional de la educación, la empresa Pearson, para el desarrollo de su versión 2018.
prendí a caminar con las organizaciones que defienden los derechos del pueblo. Así como le hacen los niños y niñas pequeñas que con dificultades dan sus primeros pasos. Poco a poco perdí el miedo y logré sostenerme con el apoyo de ustedes. Mi vida cambió totalmente cuando encerraron en Almoloya a mi esposo Arturo. Le pasó lo mismo que a Nestora. Lo acusaron de cometer 45 secuestros, de robar al ayuntamiento de Ayutla y de pertenecer a la delincuencia organizada. Todo por apoyar a la policía comunitaria del Paraíso. Fue un duro golpe en mi corazón, porque el gobierno es como un monstruo que te ataca sin compasión por ser indígena. Me quedé sola con mis seis hijos pequeños, sin casa, porque me la quemaron. Querían verme morir. Acabar no solo con Arturo, sino con su familia.
a presión externa es formidable y seguirá aumentando. Pero el enemigo principal está adentro… a menudo plenamente internalizado.
stamos transitando hacia un mundo nuevo, poscapitalista. En la medida que es un proceso que estamos viviendo, no tenemos la suficiente distancia para saber en qué periodo estamos, pero todo indica que atravesamos las fases iniciales de dicha transición. Aunque tiene hondas similitudes con las anteriores (transiciones de la antigüedad al feudalismo y de éste al capitalismo), un hecho notable es la incapacidad para comprender lo que sucede ante nuestros ojos: un verdadero proceso de construcción colectiva de mundos nuevos.
ay quien no gusta de las clasificaciones de izquierda o derecha; aunque se puede caer en simplismos, pienso que estas categorías siguen siendo útiles y especialmente didácticas a la hora de diferenciar posiciones políticas.
orman Mailer había anunciado un cambio de ritmo en la sociedad estadunidense: “Hay que alentar al sicópata que somos cada uno de nosotros, explorar esas zonas de experiencia en las que seguridad es sinónimo de aburrimiento y, por consiguiente –de depresión–, de enfermedad; hay que vivir en el presente, en el enorme presente, vacío de pasado y de futuro, de memoria y de proyecto. Vivir una vida en la que se camina hacia la destrucción o el éxtasis; hay que poner en juego toda la energía para afrontar las situaciones imprevisibles; hay que ‘iniciarse’: de lo contrario, uno está condenado” (Antología, Norman Mailer, Ed. Tiempo Contemporáneo).