El Alto.

Cinco modelos indígenas, cuatro mujeres y un hombre, recorrieron una pasarela en trajes artesanales andinos elaborados con lana de alpaca y llama, confeccionados por criadores, durante una colorida feria que reunió a decenas de pastores el fin de semana pasado, en la ciudad vecina de La Paz.

Pastores y productores de llamas y alpacas que viven en las montañas andinas exhibieron sus mejores ejemplares y productos en la séptima Expoferia de Camélidos. También ofrecieron comida típica de carne de llama, cuyo consumo se hizo popular dentro y fuera del país por su bajo contenido de grasa y alto nivel de proteína.

Asimismo, vendieron artesanías, artículos de cuero de camélidos y carne seca de llama.

Ferias como esta son un incentivo para los productores, para seguir mejorando la crianza de camélidos, y nos permite intercambiar experiencias con otros productores. He visto a las llamas y alpacas campeonas de este año y pienso que el próximo año podré traer las mías, comentó Leucadio Velarde Tancara, criador de camélidos en un poblado rural de La Paz.

Soy feliz de vestir con ropas de llama y alpaca, y no con tejidos de tela sintética, aseguró la tejedora Cristina Quispe, quien exhibió sus coloridos y artesanales tejidos.

Las autoridades improvisaron corrales para exhibir a las llamas que lucen lanas de colores en las orejas para identificar a sus propietarios.

Bolivia ocupa el segundo lugar después de Perú en la cría y aprovechamiento de camélidos con casi 3 millones de ejemplares. También Ecuador, Colombia y Chile son productores, y en años recientes se han sumado Estados Unidos y Canadá, puntualizó Ronald Pereira, secretario de Desarrollo Económico de la gobernación de La Paz, organizadora de la feria.