Washington. Barack Obama se convirtió ayer en el primer presidente en ejercicio de Estados Unidos en visitar una cárcel, al llegar a la penitenciaría de El Reno, en Oklahoma. El sistema penal y carcelario de EU es de los más costos y sobrepoblados del mundo. En el Instituto Correccional Federal de El Reno el presidente se reunirá con funcionarios penitenciarios y presos para hablar sobre sus planes de reforma. Cerca de la cuarta parte de la población carcelaria mundial está en Estados Unidos, aunque su población no supera el 5 por ciento del total. A su llegada a Oklahoma, el pasado miércoles, el mandatario fue recibido por unas 10 personas que ondearon banderas confederadas, recientemente prohibidas por su relación con la historia esclavista del país.