El dirigente de Movimiento Ciudadano (MC) en Oaxaca, Alberto Esteva Salinas, y la diputada local Margarita García García renunciaron ayer a ese partido y acusaron a la dirigencia nacional de prácticas antidemocráticas y de impulsar un proyecto falso a cambio del voto. La dirigencia nacional de MC rehusó contestar estas imputaciones.

A un mes de las elecciones en el estado gobernado por Gabino Cué, integrante de MC, Esteva Salinas y García García señalaron, en un texto dirigido a la Coordinadora Ciudadana Nacional, encabezada por Dante Delgado, que su partido se ha convertido en un proyecto amorfo que terminó por sepultar los ideales que le dieron origen.

Afirmaron que los recursos públicos que recibe sólo sirven para mantener privilegios de sus dirigentes a costa de embaucar a la sociedad con un discurso que no siguen en la práctica.

Los ahora ex militantes de Movimiento Ciudadano señalaron que el partido se ha convertido en una agencia de colocación de familiares, subordinada hasta la ignominia. Es lamentable que sus integrantes y líderes se asuman como empleados al haber renunciado a su dignidad.

El ex subsecretario de Políticas Públicas del Gobierno del Distrito Federal y la legisladora afirmaron que es imposible seguir pidiendo votos por un proyecto falso con miras a las elecciones, sobre todo cuando la mala selección de candidaturas, que obedece a favores personales, ha traído como consecuencia desastrosas campañas.