La situación de Ángel Reyna puede estar por aclararse, pues llegó a un acuerdo con Cruz Azul, pero quedan algunos puntos por definir para realizar la contratación. El principal escollo es la postura del club Monterrey, dueño de la carta del jugador.

Tras el fracaso en la negociación entre Rayados y Chivas para que el jugador se incorporara al conjunto rojiblanco, debido al sueldo que pretende Reyna, el futuro del atacante quedó a la deriva. La preocupación ahora es que Rayados obstaculice su salida.

Están a la espera de que concluya la participación de Monterrey en el Mundial de Clubes para que el presidente del equipo, Luis Miguel Salvador, se ocupe de la negociación y pueda deshacer el enredo contractual, lo que permitiría que Reyna se convierta en el primer refuerzo de La Máquina.

La relación entre Reyna y el Monterrey se ha vuelto tensa. De hecho no fue convocado por el técnico Víctor Manuel Vucetich para participar en el certamen japonés. A eso se añaden las declaraciones del propio Reyna, quien acusó a la directiva Rayada de deberle dinero.

El controvertido jugador llamó hijos a los Cementeros cuando el América dominaba a los celestes.