Londres. Al menos 10 civiles y 12 soldados sirios murieron ayer en actos de violencia. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en esta capital, indicó que al menos diez civiles, incluidos nueve miembros de una misma familia, fueron abatidos en bombardeos de las tropas en la provincia de Idleb. En la ciudad de Deir Zor los enfrentamientos dejaron 12 militares muertos. En tanto, la Organización de Naciones Unidas acusó al régimen de Bashar Assad de negar la visa a tres observadores y de mantener armamento pesado en las ciudades del país.