Madrid, 13 de abril. Bildu, la coalición de la izquierda abertzale (nacionalista) vasca creada para concurrir a los comicios de mayo próximo, reafirmó hoy, ante las amenazas y presiones absolutamente impresentables, que su proyecto es democrático y legal.

Bildu ratificó su compromiso con los valores democráticos y la legislación electoral tras una serie de comunicados en los que tanto la izquierda abertzale como Sortu (el partido ilegalizado recientemente por el Tribunal Supremo español) volvieron a rechazar la violencia y advirtieron a ETA, por primera vez, que sus acciones violentas son incompatibles con el proceso de paz.

Bildu está integrada por tres organizaciones: Eusko Alkartasuna, una formación de amplia trayectoria política en Euskadi, donde incluso fue socia de gobierno durante dos legislaturas con el Partido Nacionalista Vasco; Alternatiba, que surgió tras una escisión en el seno de Ezker Batua, sucursal del Partido Comunista en el País Vasco, y, por último, por listas independientes procedentes de la izquierda abertzale.

Bildu nació precisamente tras el fallo del Tribunal Supremo contra Sortu y ante la necesidad de este sector de la sociedad vasco (10 por ciento del electorado, algo más de 200 mil personas) de tener representantes en los comicios municipales y forales del próximo 22 de mayo.

Ante las advertencias del Ejecutivo español, del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de que mirarían con dos lupas las listas electorales de Bildu para presentar una querella de ilegalización en caso necesario, los voceros de la coalición, Peio Urizar, Oskar Matute e Itziar Amestoy, dijeron que las presiones y exigencias que están sufriendo son impensables en cualquier democracia europea.

Aun así ratificaron la limpieza de su proyecto y su total rechazo a la violencia como forma de hacer política, incluida la que ejerce el grupo armado vasco ETA.

Los independentistas de izquierda vemos amenazados nuestros derechos políticos, pero Bildu va a estar en las elecciones porque va a ser legal y no van a poder encontrar nada que lo impida porque las listas estarán integradas por hombres y mujeres libres, sin ningún impedimento para estar en las elecciones y sin ningún tipo de tacha o duda democrática, afirmaron.

Mientras tanto, José María Sagardui, también conocido como Gatza, era hasta hoy el miembro de ETA que llevaba más tiempo encarcelado. Después de permanecer 31 años en prisión, a la que entró con sólo 22 años, hoy pisó las calles de nuevo en libertad.

Sagardui fue condenado a 70 años de cárcel por su implicación en una serie de atentados atribuidos a ETA y perpetrados durante las décadas de los años 70 y 80, incluidos los asesinatos de Juan Cruz Hurtado Fernández y José María Arrizabalga Arcocha.

A pesar de que había varios homenajes previstos por círculos independentistas, entre ellos uno en su pueblo, Amorebieta, la justicia española decidió declarar ilegales tales actos después de una petición de la organización Voces contra el Terrorismo.