El procurador general de la República, Arturo Chávez Chávez, llamó a los ministros de justicia de los países iberoamericanos a trabajar de manera conjunta y con corresponsabilidad en el combate a la delincuencia organizada, ya que el desafío no es exclusivo de México, toda vez que, dijo, el tráfico de drogas y los ilícitos que le son correlativos por naturaleza, como el trasiego de armas y el lavado de dinero, junto con el tráfico de personas, son fenómenos continentales.

Asimismo, señaló ante ministros de Paraguay, Panamá, Ecuador, Chile, Uruguay, Dominicana y Portugal que se debe atender las acciones que realizan pandillas como Las Maras, ya que “los retos de la seguridad trascienden las fronteras y son fenómenos en los que las naciones deben trabajar unidas.

“El costo de la dispersión de posiciones y esfuerzos entre estados es muy elevado en términos de pérdida de eficacia. Por ello, en los años por venir, la Conferencia de Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos debe aprovechar la gran oportunidad para abordar los efectos transfronterizos y trasnacionales del narcotráfico, y de las secuelas de violencia, adicciones, incremento en los índices de comisión de otros delitos, como robo, extorsión y secuestro–, y debilitamiento del tejido social que lo acompañan”.

Chávez Chávez señaló que las naciones deben intercambiar información con relación al tráfico de armas, porque ese llamado río de hierro inunda nuestras ciudades armando a los delincuentes, y constituye el medio comisivo para segar vidas, provocando dolor y desasosiego en miles de familias en nuestros respectivos países.

Pidió a los ministros que “juntas, las naciones de Iberoamérica busquen alternativas para articular esfuerzos, homologar instituciones y procedimientos, mejorar sensiblemente el combate al blanqueo de activos y, así, debilitar el basamento financiero del crimen organizado, y para incrementar nuestra cooperación frente al fenómeno social y criminógeno de las pandillas o Maras, que son grupos numerosos, constituidos esencialmente por jóvenes –incluso menores de edad–, reclutados por las organizaciones criminales para sembrar la violencia, el terror y la muerte en muchas de nuestras ciudades en el norte, centro y sur del continente”.

En representación del presidente Felipe Calderón, el secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, aseguró que una de las prioridades de las autoridades mexicanas ha sido el fortalecimiento de las instituciones democráticas, bajo el entendimiento de que un país con instituciones débiles no puede ofrecer ni crecimiento económico ni derechos humanos ni seguridad ni libertades plenas a sus ciudadanos.

Asimismo, expuso que si bien el país había avanzado durante las últimas dos décadas en materia de democracia electoral, aunque perfectibles por supuesto, con mejores instituciones; era necesario profundizar en el diseño de las instituciones que permitan fortalecer la gobernabilidad democrática como pilar fundamental del desarrollo del país.

Según Blake Mora, las circunstancias de evolución de la criminalidad y el fortalecimiento de grupos del crimen organizado a lo largo de décadas, representan un desafío a las autoridades.