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Sindicatos contra Sarkozy

Si no hay gasolina estamos varados; va a ser una catástrofe

El desabasto de mercancías y combustibles causa pérdidas
 
Periódico La Jornada
Miércoles 20 de octubre de 2010, p. 3

Paris, 19 de octubre. Largas filas para cargar gasolina, comerciantes preocupados por la entrega de mercancías y ventas perdidas, así como turistas varados eran imágenes comunes en toda Francia este martes por la falta de combustible y las huelgas del transporte.

Los dueños de panaderías y restaurantes en París temían quedarse sin productos, mientras que otros comerciantes dijeron que los retrasos en el transporte habían disuadido a muchos compradores, lo que bajó las ventas.

Un taxista en una estación de servicio de la capital indicó que había pagado 20 centavos de euro extra por litro para llenar su auto con diesel, luego de que una semana de huelgas en las refinerías agotó el suministro en el país.

Aunque las paralizaciones no son tan masivas como el levantamiento popular estudiantil de 1968 que paralizó a la nación por semanas, o la huelga del sector público de 1995, que frustró un intento previo de reforma, las protestas están empezando a surtir efecto.

Si no hay gasolina estamos varados. Va a ser una catástrofe. Francia no puede parar así, dijo Lucie Menelet, dueña de una panadería en un suburbio en el oeste de la capital.

Violeta Juric, que maneja un concurrido restaurante en el distrito financiero de París, teme quedarse sin reservas de vino, café, cerveza y otros productos esenciales, lo que la forzaría a cerrar su negocio.

La gerente de un local de ropa cerca de la estación de tren Saint Lazare afirmó que había recibido menos clientes debido a que la huelga del transporte público hizo que muchas personas se quedaran en su casa. Las protestas podrían no durar, pero nunca vamos a recuperar los ingresos perdidos, sostuvo.

El sector de transporte terrestre de mercancías es el más afectado por el desabasto de combustible.

Nicolas Paulissen, vicepresidente del sindicato de transporte FNTR, señaló que el suministro para los vehículos de carga alcanzaría niveles críticos, poniendo en riesgo las entregas.

Sin camiones es imposible proveer a las fábricas y negocios y la economía queda paralizada, aseguró.

El gobierno informó que si es necesario usará las reservas de emergencia de combustible, guardadas para casos de guerra.